GEMA ROMERO.- Como cada año, el Consejo General de Enfermería (CGE) ha lanzado una campaña en redes sociales con motivo del 8M, bajo el hashtag #enfermeras8M. En esta ocasión para denunciar el lastre que supone el machismo para las enfermeras. La iniciativa se compone de un vídeo en su canal de YouTube, Canal Enfermero, así como distintas creatividades difundidas en sus redes sociales. 8M: Así es la campaña del CGE.
Para evidenciar este lastre, la campaña muestra a una enfermera durante su jornada laboral portando a la espalda una pesada mochila. Una mochila cargada de ladrillos en las que se pueden leer distintos hechos que impiden el avance de las enfermeras: mujer, profesión feminizada, conciliación, techos de cristal, estereotipos, resignación, invisibilidad y machismo.
“Nuestra profesión requiere una alta cualificación, una formación académica de cuatro años y dos de especialidad contando en estos momentos con un gran número de profesionales de enfermería con grados de máster y doctorado; una carrera universitaria que requiere una exigente nota de corte para acceder a ella; excelentes profesionales que cuentan con un gran prestigio en el ámbito internacional”, explica Raquel Rodríguez Llanos, vicepresidenta I del CGE. Pese a ello, la presencia de enfermeras en la toma de las grandes decisiones sanitarias sigue siendo meramente testimonial, fruto del techo de cristal que todavía supone ser mujer en muchos ámbitos, algo que es preciso cambiar.
A ello se suma el perpetuo estereotipo sexual vinculado a la profesión que, aunque cada vez en menor medida, se sigue viendo en fiestas, tiendas de disfraces, en publicidad, en series, películas o en los medios de comunicación. Su condición de mujeres les asocia otros lastres que impiden también su avance profesional, como la invisibilidad, los problemas de conciliación de la vida laboral y familiar, o directamente el machismo de la sociedad en la que vivimos que, en muchas ocasiones, les lleva a resignarse ante la situación.
Cambio de imagen
Durante todo el 8 de marzo, el Consejo General de Enfermería cambia su logo de azul a morado para mostrar su compromiso con las mujeres y su lucha por la igualdad. Además, a lo largo de todo el día se difundirán creatividades en redes sociales y se animará a los usuarios a unirse a la iniciativa para, entre todos, acabar con el machismo en la profesión a través del hashtag #enfermeras8M.