REDACCIÓN.- El Hospital Universitario Santa Cristina, de Madrid, lleva diez años realizando una iniciativa que consigue que los pacientes que ingresan para someterse a la implantación de una prótesis de cadera o de rodilla en una intervención programada puedan recibir el alta dos días antes que la media en estas operaciones con técnicas de rehabilitación convencionales. Como media, los pacientes abandonan el hospital entre cuatro y cinco días después del día de su ingreso.
Hasta ahora, 4.758 pacientes han sido tratados mediante la denominada Rehabilitación Acelerada o fast track, que, mediante un trabajo multidisciplinar con el paciente, reduce de forma significativa la estancia en el hospital y puede recuperar antes su vida habitual. Este tipo de intervenciones se realizan para paliar los daños que la artrosis ha causado en las articulaciones y, por tanto, en la vida diaria de los pacientes.
La Rehabilitación Acelerada en cirugía de cadera y de rodilla se basa en el programa de actuación (una Vía Clínica) que han diseñado los servicios de Traumatología y Rehabilitación, Fisioterapia y Anestesia a través de sus profesionales médicos y de enfermería.
Entre otras ventajas, supone una reducción en las complicaciones tras la operación, un menor tiempo de estancia en el hospital, reducir la convalecencia en el domicilio, no tener que acudir a otros servicios de rehabilitación y la reincorporación precoz del paciente a las actividades de la vida diaria.
Además, con este tipo de rehabilitación, se reducen las complicaciones circulatorias y los catéteres se pueden retirar de forma precoz. También mejora la función cardiorrespiratoria y la recuperación de la movilidad articular, al tiempo que disminuye los problemas de desorientación que se dan en ocasiones en estancias hospitalarias.
Realizar este tipo de recuperación ayuda a evitar que se sobrecarguen los servicios de rehabilitación externos al hospital, reduce los costes del proceso y permite programar no solo el ingreso del paciente, sino también el alta, logrando una programación más ágil de las intervenciones y, por tanto, un ahorro de recursos.
Cinco días para recuperar las actividades habituales
La Rehabilitación Acelerada no aumenta el número de complicaciones ni de reingresos en el hospital y comienza menos de 24 horas tras la intervención, con ejercicios para tonificar músculos y de prevención de trombosis y bipedestación.
El segundo día de estancia en el centro el paciente comienza a subir y bajar escaleras y a hacer, con la menor ayuda posible, sus actividades habituales. Los dos días siguientes se dedican a ganar destreza hasta el día del alta.
“La gran mayoría de los pacientes que intervenimos para realizar una sustitución de cadera o de rodilla en el servicio de Traumatología del Hospital Santa Cristina pueden realizar esta Rehabilitación Acelerada”, afirma Olga Pérez Moro, jefa de sección de Rehabilitación del Hospital Universitario Santa Cristina.
De los 4.758 pacientes atendidos con esta técnica en el Hospital Santa Cristina entre 2005 y 2015, solo el 3% de los pacientes han requerido rehabilitación ambulatoria posterior y el 98% de los pacientes se muestra satisfecho o muy satisfecho con el proceso.