El Colegio de Enfermería de Granada celebra las VI Jornadas de Ética y Deontología centradas por primera vez en la «Bioética en urgencias y emergencias sanitarias. Un evento en el que, a través de mesas redondas y diferentes ponencias las enfermeras han abordado cómo actuar en situaciones extremas para salvar vidas. «La urgencia, la incertidumbre y la presión limitan la deliberación ética, dificultando la aplicación de principios bioéticos como beneficencia, no maleficencia, autonomía y justicia», afirman desde la institución enfermera de Granada.
Tal y como ha explicado en el acto de bienvenida Jacinto Escobar, presidente de las enfermeras de Granada, estas jornadas generan «conocimientos para poder actuar como debemos actuar y con qué valores debemos hacerlo. A través de los cuidados las enfermeras tenemos ese poder de contribuir a que nuestra actuación sea más humana y saludable», explica.
Por su parte, Rosa García Carmona, presidenta de la Comisión deontológica del Colegio de Enfermería de Granada, ha afirmado que este evento sirve «para reflexionar en torno a la ética en emergencias y urgencias, vamos a tener que tomar decisiones rápidas y bien ejecutadas, tenemos que velar por los derechos y dignidad de los pacientes».
La primera parte de las jornadas ha comenzado con la celebración de una mesa redonda. Compuesta por Elisabeth Patricia Fuentes, enfermera coordinadora de trasplantes en HUVN, experta en trasplantes y UCI; Carmen Mª Alba Fernández, colaboradora del grupo de prevención de contenciones del SSPA y experta en contención mecánica y Juan Carlos Sánchez, enfermero comandante, la mesa ha destacado la importancia del consentimiento informado, la autonomía del paciente, y la necesidad de un enfoque multidisciplinar en la toma de decisiones, especialmente en casos de limitación del esfuerzo terapéutico.
Al finalizar la mesa se presentó un nuevo manual para guiar la práctica en la reducción del uso de contenciones mecánicas.

Donaciones
Uno de los temas que se han abordado en la jornada ha sido las donaciones. En España, a pesar de ser líderes mundiales en donaciones y trasplantes, existe una significativa lista de espera con altas tasas de mortalidad antes de recibir un órgano, el 10% fallecerá antes de recibir un trasplante. En España hay cerca de 4.500 personas en lista de espera para recibir un riñón.
También se explicó durante el evento el protocolo para la eutanasia en Andalucía, donde se destacó la independencia de este proceso respecto a la donación de órganos y la necesidad de que el paciente que desea donar órganos tras la eutanasia fallezca en un hospital.
Uso de contenciones
La experta en contención mecánica de la jornada propuso un enfoque preventivo, incluyendo el acompañamiento, la comunicación efectiva, el manejo ambiental, la contención verbal y la farmacológica como alternativas a la contención mecánica, enfatizando que esta solo debe utilizarse como último recurso. Se enfatizó la importancia de la formación de los profesionales y la familia en estas alternativas. «No es un cuidado terapéutico, aunque justifiquemos su uso de que es bueno para el paciente», apuntaba.
¿Existe la bioética en ambientes bélicos?
El comandante enfermero presentó un relato de sus experiencias en misiones médicas en zonas de conflicto. Exponiendo situaciones caóticas con recursos limitados, donde tuvieron que tomar decisiones rápidas sobre el triaje de pacientes, a veces sin considerar su autonomía. Una de las conclusiones de esta parte de la jornada fue que en situaciones de emergencia con recursos limitados, se prioriza la atención a pacientes con mayor probabilidad de supervivencia. Además también se plantearon dilemas éticos sobre el uso de armas para la autodefensa, la prioridad de continuar una misión sobre atender a heridos y la divulgación de información del paciente.
Urgencias y emergencias
David Rodríguez Arias, miembro de unidad científica de excelencia FiloLab-URG, comenzó analizando el caso del Memorial Medical Center tras el Huracán Katrina como ejemplo de toma de decisiones éticas en circunstancias extremas. Se discutieron las decisiones sobre la priorización de pacientes para la evacuación y la administración de medicamentos para aliviar el sufrimiento, planteando dilemas éticos sobre la línea entre sedación paliativa y eutanasia. La investigación posterior no pudo determinar si la administración de medicamentos tenía una intención puramente paliativa o si aceleró la muerte de algunos pacientes.
Se abordó también el papel de la beneficencia, la no maleficencia y la autonomía del paciente en estas decisiones. «Cuando uno no es libre de elección en una situación extrema, la ética no existe porque no puedes elegir», concluía Rodríguez en su intervención.
Las jornadas han puesto en valor la formación en bioética como un aspecto esencial para garantizar que los profesionales de la salud puedan tomar decisiones rápidas sin renunciar a la humanidad y la dignidad del paciente. «La reflexión sobre estos dilemas no es solo una cuestión académica, sino una necesidad urgente en la práctica clínica diaria», explican desde la institución enfermera.