Un estudio piloto, liderado por enfermeras, propone los datos enfermeros como propuesta de valor añadido en la gestión hospitalaria en la era de la tecnología 4.0. Se trata de un estudio piloto experimental -que han presentado como comunicación oral en el Congreso Internacional de Enfermeras en Helsinki- que analiza el impacto de incluir los datos enfermeros, estructurados en lenguaje normalizado en los sistemas de información hospitalaria del Servicio Andaluz de Salud (SAS). «En concreto, se ha evaluado cómo su incorporación modificó indicadores clave como el peso GRD, los episodios outliers y los niveles de severidad en 50 episodios asistenciales reales de un hospital de alta complejidad. El estudio compara estas variables antes y después de incluir datos enfermeros», explican las investigadoras Tamara Moya, enfermera en el Hospital Universitario Virgen Macarena de Sevilla y Mª Dolores Mateos-García, profesora titular de la Universidad Vinculada al Hospital de Valme.

Resultados

Este trabajo aporta la evidencia de que los registros enfermeros, más allá de su valor clínico y legal, tienen una repercusión directa en la financiación, organización y eficiencia del sistema sanitario. En el día a día, esto se traduce en que cada registro que hace la enfermera puede contribuir a visibilizar la carga asistencial, justificar recursos, mejorar la asignación de camas, y dar soporte a decisiones clínicas y de gestión. Además, refuerza el rol de la enfermería como generadora de información estratégica en el contexto de la salud digital. 

Entre las principales conclusiones se extrae que «la inclusión de los datos enfermeros aumentó significativamente el peso GRD (de 0,98 a 1,29; p = 0,007), lo que implica una mejora en la valoración económica del episodio. Además, se redujeron un 36% los episodios clasificados como outliers (p = 0,008), lo cual impacta directamente en la eficiencia de la gestión de camas y en la justificación de las estancias prolongadas.  El estudio demuestra que los datos enfermeros, correctamente estructurados e integrados, contribuyen a hacer visible lo invisible y suponen una fuente valiosa para la gestión sanitaria, pues mejora el reconocimiento de la complejidad asistencial», explican.

Lo próximos pasos de este proyecto son integrar de forma plena y sistemática los registros enfermeros en los sistemas de información, desarrollar herramientas que permitan la explotación de estos datos en tiempo real para investigación, planificación y toma de decisiones y, por último, establecer un conjunto mínimo básico de datos de enfermería. «Seguir investigando en este campo permitirá a la profesión enfermera posicionarse en la vanguardia de la transformación digital sanitaria, aumentando su visibilidad, reconocimiento y capacidad de liderazgo en la gestión de cuidados basada en datos», concluyen las investigadoras.