Incluso en profesiones sanitarias altamente feminizadas, como la enfermería, la brecha de genero sigue patente, especialmente si hablamos de los puestos de responsabilidad, gestión y liderazgo. Sobre esta tesis se ha vertebrado la Jornada Parlamentaria ‘El impulso del talento femenino en la sanidad: un compromiso’, celebrada en el Congreso de los Diputados y que ha puesto sobre la mesa un tema que, muchas veces, se da por hecho.
“Hay gente joven que se piensa que ya está todo hecho en lo que se refiere a la brecha de género, y todavía estamos lejos de conseguir una igualdad real”, ha puesto de manifiesto Carmen Martínez, portavoz del PSOE en la Comisión de Sanidad del Congreso. Una idea que han apoyado sus compañeras Alda Recas, portavoz de Sumar de la Comisión de Sanidad y María del Mar Vázquez, portavoz del grupo popular de la mencionada comisión.
“Hay barreras sistémicas, falta de acceso a recursos… dificultades a las que se enfrentar las mujeres porque las redes, en sanidad y en todos los ámbitos, históricamente han sido masculinas”, ha señalado la representante popular. Martínez ha aprovechado la ocasión para recordar un dato según la OMS, la brecha de género y salarial en sanidad es muy pronunciada: las mujeres cobran un 24% menos que los hombres.
Visibilidad para conseguir la igualdad
Alda Recas ha sido la encargada de poner la visión enfermera sobre la mesa. La diputada ha comentado que, como enfermera, “tiene envidia de ver todos los estudios que hay sobre el ámbito de las pharmas, o de la medicina” y no sobre el talento enfermero. “Ya hay estudios que demuestran que el empoderamiento y la visibilidad pueden conseguir la igualdad. Hablar de esto, en el congreso, esta visibilización, es importantísima. Y tenemos el compromiso de seguir trabajando en ello”, ha desarrollado.
Además, han resaltado la importancia de promover la formación de gestión desde el propio sistema para detectar e impulsar el talento femenino. “No tenemos una carrera directiva, y en la formación de las especialidades, más allá de la especialización en Salud Pública, no toca mucho el desarrollo de la gestión”, ha puntualizado PP.
Formación pública en gestión
De esta manera Recas ha apelado a la necesidad de contar “con una formación de la gestión desde lo público para que, quien tenga capacidad y talento, pueda acceder a ello”. Y además a destacado como lo más “vanguardista” conseguir que una mujer pueda tener acceso a esa formación a la misma vez que tiene buenas oportunidades y capacidades para conciliar.
“La masculinización del sistema permea en toda la escala del desarrollo profesional”, ha asegurado Javier Padilla, secretario de Estado, durante su intervención. Además, ha hablado de manera concreta sobre las desigualdades que se da en las profesiones relacionadas con el cuidado. “La falta de desarrollo en el ámbito del liderazgo tiene un sesgo de género. Estoy seguro de que si las enfermeras fueran en su mayoría enfermeros se habría avanzado mucho más en temas de ordenación profesional”, ha dicho.
Asimismo, ha recurrido a los últimos datos sobre la situación de las enfermeras españolas publicados por el Ministerio de Sanidad y que coinciden con los análisis del Consejo General de Enfermería (CGE), que indican que, aunque hay seis veces más mujeres que hombres en enfermería, son ellos los que copan los puestos de gestión. “Es un caso en el que la feminización está incrustada en la génesis de la profesión sigue habiendo una diferencia muy notable”, ha añadido.
Presencia enfermera
Raquel Rodríguez Llanos, vicepresidenta I del CGE, ha puesto de manifiesto la importancia de la presencia enfermera en estos eventos. “Es una manera de poner en valor y hacer visible el impulso de las mujeres en sanidad en general y de las enfermeras en particular”, ha asegurado. Además, ha comentado la importancia de tener espacios “donde debatir y reflexionar sobre la brecha de género y los sesgos para favorecer la mejora de la igualdad de las enfermeras dentro de los sistemas sanitarios”.
“Este evento es una herramienta más de la hoja de ruta necesaria para mejorar las condiciones de las mujeres enfermeras dentro del Sistema Nacional de Salud (SNS).