ALICIA ALMENDROS.- Su traducción al español es «picante», pero la nueva droga “spice” va mucho más allá que un simple picor. Convierte en muertos vivientes aquellos que la consumen. Y al ser barata y de fácil acceso, las cárceles se han convertido en su principal punto de consumo. El uso de sustancias psicoactivas como “spice” es generalizado en las prisiones de Reino Unido, algo que según el Royal College of Nursing (RCN) pone en peligro la vida de las enfermeras que trabajan en ellas: “pedimos a los jefes de prisiones que hagan más por proteger a las enfermeras y al resto de trabajadores de la salud de los efectos de las drogas”, denuncian.
Un latido rápido de corazón, desorientación, agresión o pérdida de conocimiento son sólo algunos de los síntomas más comunes de “spice”, pero las situaciones pueden cambiar rápidamente. Un recluso violento y aullador puede colapsar repentinamente hasta la inconsciencia, incluso en el peor caso la muerte, según publica The Guardian en un artículo.
Cuando ocurre cualquier incidente en la cárcel las enfermeras son las primeras en llegar, accediendo a celdas donde la exposición a esta sustancia es inevitable. “Spice” es una especie de marihuana sintética cuyas sustancias químicas pueden producir efectos de alteración del cerebro. De hecho, los miembros del RCN han informado de varios enfermeros heridos que sufrieron la inhalación de la droga, algunos incluso no pudieron conducir a casa después de su turno. “La sensación es realmente extraña. Tras atender a un paciente me sentí mareado, con náuseas, como si el mundo se hubiera alejado”, explica un enfermero en la web del RCN. “Tuve que permanecer dentro del coche en el aparcamiento durante 50 minutos después del trabajo hasta que me vi preparada para conducir”, añade otra enfermera.
Janet Davies, directora ejecutiva del RCN, comenta que “esta nueva droga representa una seria amenaza para las enfermeras, los asistentes de atención médica y el personal penitenciario, cuya seguridad y salud a largo plazo se ponen en peligro día tras día”. Y es en el RCN consta como una enfermera tuvo que ser trasladada en ambulancia a un hospital tras quedar inconsciente por los humos psicoactivos.