GEMA ROMERO.- Las anomalías cardíacas causadas por el nacimiento prematuro se pueden corregir con el ejercicio en la edad adulta, según un estudio presentado en EuroCMR 2019, el congreso científico de la Sociedad Europea de Cardiología (ESC) que se está celebrando en Venecia (Italia).
Entre el 1 y el 2% de los adultos jóvenes fueron grandes prematuros, nacieron más de dos meses antes de finalizar la gestación y tienen anomalías cardíacas que aumentan el riesgo de enfermedad cardiovascular. Por ejemplo, su corazón es más pequeño y tiene que bombear con más fuerza para suministrar sangre al cuerpo.
«Hasta ahora no sabíamos si esto era permanente o susceptible de mejoría», ha afirmado la profesora Anne Monique Nuyt, neonatóloga e investigadora co-autora principal del estudio. «Ahora, por primera vez, hemos demostrado cómo hacer que los corazones prematuros funcionen tan bien como los del resto de la población, y sin medicamentos, sólo un programa de ejercicios de 14 semanas».
El estudio incluyó a 14 participantes de 18 a 29 años de edad, de los cuales ocho nacieron prematuros y seis actuaron como controles. Todos los participantes se sometieron a un programa de ejercicios de entrenamiento aeróbico y de resistencia de 14 semanas, tres veces a la semana. Esto incluyó dos sesiones de grupo supervisadas de 90 minutos y una sesión supervisada en el hogar y se basó en las recomendaciones de la guía canadiense de al menos 150 minutos de actividad física moderada a vigorosa por semana en combinación con entrenamiento de resistencia.
La estructura y la función del corazón se midieron antes y después del programa de ejercicios utilizando imágenes de resonancia magnética cardiovascular (RMC).
En comparación con los controles, la estructura y función del corazón fueron peores en los participantes prematuros al inicio del estudio, pero similares después del programa de ejercicios. Específicamente, las funciones de bombeo y contracción del corazón se normalizaron, lo que significa que el corazón ya no tuvo que trabajar más para proporcionar sangre al cuerpo.
Ejercicios cortos
«Encontramos que un programa de ejercicios cortos puede mejorar el rendimiento cardíaco general y las anomalías sutiles en la función cardíaca en adultos prematuros», sostiene Elizabeth Hillier, de la Universidad de McGill, Montreal (Canadá) y autora principal del estudio. «Los avances en la atención neonatal han permitido que los bebés prematuros sobrevivan, pero la forma y función anormales del corazón se mantienen. El ejercicio en la adultez temprana corrige estas deficiencias, lo que debería reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular» en el futuro.
El equipo utilizó un protocolo CMR que visualiza cambios sutiles en la forma y función del corazón. La imagen se realizó durante la hiperventilación durante 60 segundos, seguida de un control de la respiración para evaluar cómo funcionaba el corazón en una situación estresante (similar al buceo). «Con esta técnica podemos detectar incluso anomalías leves y rastrear la respuesta a las intervenciones. A diferencia de otros métodos, no tuvimos que inyectar un contraste, no se usó radiación, y no tuvimos que administrar medicamentos para poner el corazón bajo estrés”, ha explicado Hillier.