ANA MUÑOZ.- La secretaria general de Partido Popular, María Dolores de Cospedal, aseguró este martes que el Gobierno “paró y retiró” el anteproyecto de la Ley de Servicios y Colegios Profesionales a pesar de que el Ejecutivo recibió “una enorme presión por parte de la Unión Europea” para sacarlo adelante. Sin embargo, explicó Cospedal, “desde el propio Gobierno y desde el partido se planteó que no podíamos seguir adelante por muy intensas y muy persistentes que fueran las demandas de la Unión Europea. Querer quedar bien con todo el mundo es una cosa muy complicada”.

Durante un desayuno informativo organizado por la Fundación Caminos, dependiente del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, la secretaria general de los populares se definió como “una convencida de la utilidad de los colegios profesionales” asegurando que éstos deben servir “no sólo para defender los intereses de los propios colegiados, sino también para aportar a la sociedad todo su conocimiento y toda su experiencia”.

La presentación del anteproyecto se remonta a principios de 2013 y el anuncio de Cospedal llega después de que el ministro de Economía, Luis de Guindos, anunciara en febrero que el anteproyecto de ley se había retrasado por tiempo indefinido.

El anteproyecto retirado por el Gobierno establecía como necesario, según el departamento encabezado por De Guindos, “un nuevo marco que aclare, simplifique y sistematice la regulación de los servicios profesionales, estableciendo el mapa de obligaciones de colegiación y simplificando las reservas de actividad existentes”, con el objetivo de “mejorar la competitividad de nuestra economía y el funcionamiento del sector de los servicios profesionales”.

Aunque el anteproyecto limitaba las profesiones para las que se preveía la colegiación obligatoria, ésta se ratificaba en el caso de las profesiones sanitarias (enfermeros, médicos, fisioterapeutas, podólogos y dentistas), del ámbito judicial (como os abogados) y aquellas profesiones técnicas que exigen visados (como los arquitectos).

El presidente del Consejo General de Enfermería, Máximo González Jurado, opina que la retirada de la Ley de Colegios Profesionales “no es, en absoluto, una buena noticia para la sociedad española. Nosotros hemos apoyado el proyecto desde sus inicios, y creemos que era una Ley muy avanzada que hubiese supuesto importantes beneficios para la sociedad en general, y para los pacientes en particular en el caso de las profesiones sanitarias.

Aunque González Jurado reconoce que el anteproyecto de ley “tenía algunos aspectos que se debían mejorar y se podían limar”, asegura que, en líneas generales, “colocaba a España a la vanguardia de Europa en cuanto a la regulación de colegios profesionales”. El presidente de los enfermeros españoles asegura que “respecto a los matices que se podían haber negociado durante la tramitación parlamentaria cabe destacar que ya habíamos iniciado conversaciones con los Grupos Parlamentarios y sin ninguna duda podía haberse aprobado un magnífico proyecto que pusiese nuestra regulación a la vanguardia Europea”.

González Jurado recalca, por último, que “la enfermería española sí quiere adaptarse a la legislación más avanzada” y de hecho asegura que “en la Organización Colegial de Enfermería estábamos esperando a la tramitación de la Ley para hacer una reforma en profundidad de nuestros Estatutos Generales de la Profesión en base al ordenamiento que establecía este nuevo proyecto normativo”. A pesar de la retirada del anteproyecto, el presidente de la Enfermería asegura que sí se planteará una reforma estatutaria “en líneas muy parecidas”.