GEMA ROMERO.- La Comisión Europea está trabajando en una nueva directiva sobre la proporcionalidad que deben seguir las normas nacionales en la regulación de las profesiones, en relación con las modificaciones que exige la directiva de cualificaciones profesionales a los diferentes Estados miembros. Para la Unión Europea, una regulación desproporcionada tiene “efectos negativos y a varios niveles en la economía”, con un impacto sustancial en la competitividad de la UE, de manera que es necesario abordarla a escala europea.
Para fijar la postura de la Red Europea de Reguladores de Enfermería, presidida por el Consejo General de Enfermería, representantes de 7 países se reúnen este lunes en Madrid. En la reunión analizarán la directiva, así como la propuesta de posicionamiento común de la Red y las diversas enmiendas que deberían proponerse a la Comisión Europea.
Como ya ha manifestado la Red en diversas ocasiones, su función primordial es “proteger la salud pública y velar por la seguridad del mediante la regulación de la profesión enfermera”. Por ello, “en cualquier regulación que se haga de la profesión se debe dar prioridad a la salud pública por encima de intereses económicos y de libre mercado”. Convicción que guiará las consideraciones que van a proponer en sus alegaciones a la directiva.
Presididos por España, la reunión contará con representantes de los órganos reguladores de la enfermería en Rumanía, Holanda, Portugal, Chipre, Francia y Reino Unido.