REDACCIÓN.- Científicos del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos y de la Universidad de Berkeley, California, han desarrollo un microscopio para el móvil capaz de medir los niveles en sangre del loa loa, un gusano nemátodo y parásito de África central y occidental, causante de la filariasis, según un artículo publicado en la revista Science Translational Medicine. Este dispositivo puede permitir la reanudación de las campañas de administración de fármacos para erradicar las enfermedades parasitarias y la filariasis linfática en estas zonas.
Los esfuerzos para eliminar estas enfermedades en África central a través de la administración de antiparasitarios a toda la población se suspendieron dados los efectos secundarios detectados en personas con elevados niveles de las larvas del gusano loa. Una potencial solución a este problema radica en identificar y excluir de la administración de los fármacos profilácticos a estas personas. Sin embargo, los métodos tradicionales de detección requieren bastante tiempo y deben ser realizados por personal preparado para ello y con equipamiento de laboratorio.
Para la detección rápida de las infecciones por Loa en entornos comunitarios, los científicos han desarrollado CellScope Loa, un microscopio en formato de vídeo integrado en el iPhone 5S. Con la ayuda de una aplicación, el dispositivo automáticamente captura y analiza vídeos del movimiento característico «retorciéndose» de las larvas, permitiendo su cuantificación en la sangre con sólo un pinchazo en el dedo y en menos de dos minutos. No se requiere una preparación especial de la sangre, limitando los errores potenciales y las pérdidas de muestras. Además, los trabajadores sanitarios necesitan una preparación mínima para utilizar el dispositivo automatizado.
Las muestras de sangre tomadas en personas potencialmente infectadas con Loa en Camerún, África, mostraron que los resultados de CellScope Loa se corresponden con los obtenidos por los métodos tradicionales, con la correcta identificación de las personas con los índices elevados, dentro de un aceptable margen de error. Aunque son necesarios estudios adicionales para preparar la tecnología para su utilización masiva, los investigadores pronostican que un equipo de tres personas podría cribar a 200 personas durante las cuatro horas en las que el Loa alcanza su pico máximo de presencia en la sangre.