EUROPA PRESS.- Los investigadores han descubierto en los Países Bajos una nueva cepa de VIH muy virulenta y más perjudicial para la salud, según un estudio dirigido por investigadores del Instituto de Big Data de la Universidad de Oxford, en Reino Unido, y publicado en la revista ‘Science’.
Como ha demostrado la actual pandemia de coronavirus, las nuevas mutaciones en las secuencias genéticas virales pueden tener un impacto significativo en la transmisibilidad del virus y en los daños que causa. Durante muchos años se ha temido que esto pudiera ocurrir en el virus VIH-1, que ya afecta a 38 millones de personas en todo el mundo y ha causado 33 millones de muertes hasta la fecha, y ahora este nuevo estudio lo acaba de confirmar.
Los individuos infectados con la nueva «variante VB» (por subtipo virulento B) mostraron diferencias significativas antes del tratamiento antirretroviral en comparación con los individuos infectados con otras variantes del VIH.
Así, los individuos con la variante VB tenían una carga viral (el nivel del virus en la sangre) entre 3,5 y 5,5 veces mayor. Además, la tasa de disminución de las células CD4 (el sello distintivo del daño del sistema inmunitario causado por el VIH) se produjo dos veces más rápido en los individuos con la variante VB, lo que los puso en riesgo de desarrollar el SIDA mucho más rápidamente.
Al mismo tiempo, los individuos con la variante VB también mostraron un mayor riesgo de transmitir el virus a otras personas.
Los investigadores apuntan que resulta tranquilizador que, tras iniciar el tratamiento, los individuos con la variante VB tuvieran una recuperación del sistema inmunitario y una supervivencia similares a las de los individuos con otras variantes del VIH. Sin embargo, subrayan que, dado que la variante VB provoca un declive más rápido de la fuerza del sistema inmunitario, es fundamental que los individuos sean diagnosticados de forma temprana y comiencen el tratamiento lo antes posible.
Si se sigue investigando para comprender el mecanismo que hace que la variante VB sea más transmisible y dañina para el sistema inmunitario, se podrían descubrir nuevas dianas para los fármacos antirretrovirales de nueva generación. La variante VB se caracteriza por tener muchas mutaciones repartidas por todo el genoma, lo que significa que por el momento no se puede identificar una única causa genética.
El autor principal, el doctor Chris Wymant, del Instituto de Big Data de la Universidad de Oxford y del Departamento de Medicina de Nuffield, recuerdan que «antes de este estudio se sabía que la genética del virus del VIH era relevante para la virulencia, lo que implicaba que la evolución de una nueva variante podría cambiar su impacto en la salud. El descubrimiento de la variante VB lo ha demostrado, proporcionando un ejemplo poco frecuente del riesgo que supone la evolución de la virulencia viral», subraya.
Por su parte, el autor principal, el profesor Christophe Fraser, del Instituto de Big Data de la Universidad de Oxford y del Departamento de Medicina de Nuffield, añade que los nuevos hallazgos «subrayan la importancia de las orientaciones de la Organización Mundial de la Salud para que las personas con riesgo de contraer el VIH tengan acceso a pruebas periódicas que permitan un diagnóstico temprano, seguido de un tratamiento inmediato».
Según resalta, «esto limita el tiempo en que el VIH puede dañar el sistema inmunitario de una persona y poner en peligro su salud. También garantiza que el VIH se suprima lo antes posible, lo que evita la transmisión a otras personas».
La variante VB se identificó por primera vez en 17 personas seropositivas del proyecto BEEHIVE, un estudio en curso que recoge muestras de toda Europa y Uganda. Dado que 15 de estas personas procedían de los Países Bajos, los investigadores analizaron los datos de una cohorte de más de 6.700 seropositivos en ese país. Así se identificaron otros 92 individuos con la variante, procedentes de todas las regiones de los Países Bajos, lo que elevó el total a 109.
Al analizar los patrones de variación genética entre las muestras, los investigadores estiman que la variante VB surgió por primera vez a finales de la década de 1980 y en la de 1990 en los Países Bajos. Se propagó más rápidamente que otras variantes del VIH durante la década de 2000, pero su propagación ha disminuido desde aproximadamente 2010. El equipo de investigación cree que la variante VB surgió a pesar del tratamiento generalizado en los Países Bajos, no a causa de él, ya que un tratamiento eficaz puede suprimir la transmisión.
Los individuos con la variante VB mostraban las características típicas de las personas que viven con el VIH en los Países Bajos, incluyendo la edad, el sexo y la supuesta forma de transmisión. Esto indica que la mayor transmisibilidad de la variante VB se debe a una propiedad del propio virus, más que a una característica de las personas con el virus.