IRENE BALLESTEROS.- ¿Tiene las mismas oportunidades en lo que a salud se refiere los Duques de Sussex que una familia del Bronx? El género o el lugar de nacimiento condicionan de forma decisiva la salud de la población. En concreto, la zona donde nacemos y crecemos es uno de los determinantes que más impacta en nuestro bienestar. Así lo ha afirmado un grupo de enfermeras en una de las charlas formativas desarrolladas por el Colegio de Enfermería del Principado de Asturias (Codepa) dentro de la campaña «Ruta Enfermera» a su paso por Gijón. Una iniciativa impulsada por el Consejo General de Enfermería (CGE) que acercará la labor enfermera por toda España. «Hemos hablado de los determinantes de salud y hemos comentado lo que puede cambiar nuestra salud dependiendo de la zona donde hemos nacido y cómo los determinantes sociales pueden cambiar nuestro estado de salud. Esto lo hemos relacionado con la acción comunitaria y lo que trabajamos las enfermeras en los centros de salud en el ámbito comunitario para paliar esas desigualdades sociales. Nos hemos centrado sobre todo en la zona donde nacemos, que sería el determinante que más puede afectar al estado de salud de una persona», explica Teresa López, enfermera especialista Familiar y Comunitaria del Centro de Salud de El Coto (Gijón).
Redes de apoyo
Son muchas las medidas que se pueden tomar para paliar los efectos que los determinantes sociales tienen sobre la salud. Sin embargo, el más efectivo y realista, sin duda, es la acción de la Enfermería especialista Familiar y Comunitaria. «La enfermería especialista Familiar y Comunitaria lo que hace es un diagnóstico de salud y comunitario y ve las necesidades de la población así como los recursos o los activos de salud y con ello lo que hace es tejer redes de apoyo y crear comunidad para solventar esos determinantes sociales de la mejor manera posible», cuenta Alba Díaz, enfermera especialista Familiar y Comunitaria del Centro de Salud de Laviada (Gijón).
Desde la enfermería de Gijón cuentan con programas de apoyo para minimizar el impacto de estos determinantes en las poblaciones vulnerables. «Tenemos una serie de programas que se organizan a través de la Consejería o a través del centro de salud o incluso de los propios pacientes. Gracias a eso, las enfermeras podemos salir a los colegios, institutos e incluso asociaciones de vecinos para ayudar y cuidar», explica López.
Esta ha sido una de las charlas que componen el programa formativo que ofrece el Codepa que continúa su Ruta Enfermera hacia Oviedo, donde permanecerá hasta 21 de julio en la Plaza del Carbayón y cuya inauguración ha contado con la presencia de la directora general de Cuidados, Humanización y Atención Sociosanitaria, María Josefa Fernández Cañedo, quien ha explicado en su intervención que el Servicio de Salud «está haciendo todo lo posible» para que la escasez de profesionales no repercuta en la asistencia sanitaria. «Lo que pasa es que es una situación compleja», ha razonado, «máxime cuando estamos en una época estival de descanso de los profesionales que también tienen derecho», concluye.