EUROPA PRESS/REDACCIÓN.- Ana Mato presentó su dimisión a última hora de la tarde de ayer como ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad tras una conversación con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que hasta ahora siempre la había defendido en público, según informaron a Europa Press fuentes gubernamentales.
Su dimisión se produjo unas ocho horas después de que el juez de la Audiencia Nacional, Pablo Ruz, diera a conocer un auto en el que propone juzgar a la ya ex ministra como partícipe a título lucrativo de las actividades de su ex marido Jesús Sepúlveda, por la implicación directa de éste en la trama Gürtel. Aunque fuentes de su departamento daban a entender a media tarde que Ana Mato no dimitiría, que seguía con su agenda de trabajo y que mañana haría declaraciones en el Congreso, esa previsión dio un giro inesperado a última hora de la tarde hasta el punto de presentar su dimisión.
De hecho, fuentes cercanas a Mato apuntaban a que se haría público un comunicado en el que se iba a resaltar únicamente que ni estaba imputada ni el juez le había atribuido ningún delito. Sin embargo, esa explicación se acompañó finalmente con el anuncio de la dimisión de la titular de Sanidad.
Esa renuncia de Ana Mato se produjo tras una conversación con Mariano Rajoy, quien la ha defendido públicamente en otras situaciones críticas que han afectado a la exministra, como la reciente crisis del ébola u otros momentos procesales del ‘caso Gürtel’. Ana Mato ha justificado su decisión de dimitir para que su permanencia al frente del departamento de Sanidad no sea utilizado para perjudicar al Gobierno de España, al presidente Rajoy y al Partido Popular.
La ministra se derrumbó
Fuentes cercanas a Mato han señalado que la ministra se derrumbó en la tarde de ayer ante la nueva catarata de críticas por el auto del juez Ruz que la colocaban en el ojo del huracán ante el debate anticorrupción que se celebrará este jueves en el Congreso y en el que Rajoy presentará su batería de medidas anticorrupción. «Ana Mato no estaba dispuesta a pasar otra vez por el mismo calvario», han señalado las mismas fuentes, que han explicado que decidió presentar a Rajoy su dimisión con el fin de evitar ser de nuevo el centro de la diana de las críticas de la oposición al Gobierno.
Fuentes del PP han subrayado que el jefe del Ejecutivo ha aceptado en esta ocasión su dimisión condicionado por el debate contra la corrupción de este jueves en la Cámara Baja. «Si no se celebrara ese debate no habría aceptado su renuncia», destacan. En las filas ‘populares’ reconocen que dimisión de la ministra es un alivio ante el debate parlamentario de hoy jueves, ya que los grupos de la oposición no podrán acosar al jefe del Ejecutivo con este asunto exigiendo su inmediata dimisión como ha ocurrido este miércoles nada más conocer el auto del juez Ruz.
Polémicas, inacción y pactos con los profesionales
La trayectoria de Mato al frente del Ministerio ha tenido su último capítulo en la reciente crisis del ébola, tras el contagio de la auxiliar de enfermería, Teresa Romero. La ya ex ministra se mostró insegura y sin respuesta ante el primer caso de infección en Europa y finalmente fue la vicepresidenta del Ejecutivo la que asumió la dirección del comité especial para abordar la crisis sanitaria mientras que Mato quedó al margen del mismo.
La enfermería estaba dispuesta a romper el pacto firmado en 2013
Algo parecido ocurrió con una legislación polémica y de gran calado social como la Ley del Aborto, que acabó retirada y con Alberto Ruiz Gallardón abandonando la cartera de Justicia. Una vez más, Sanidad quedó en un segundo plano en favor de Justicia. Tras la retirada, finalmente Mato asumió la responsabilidad de realizar una reforma más limitada de la Ley de Plazos circunscrita a establecer el consentimiento paterno para aquellas menores de 16 y 17 años que quieran abortar. La intención del Gobierno era llevar a cabo esta reforma a través de la ley de protección a la infancia, un proyecto que entraría en el Parlamento en el Congreso el próximo mes de diciembre.
La intención del Ejecutivo era acompañar el proyecto de un plan de apoyo a la familia y a la maternidad. Estos serán uno de los temas que deja Mato a su sustituto, además de un proyecto de Ley para combatir el consumo de alcohol entre los jóvenes o la definitiva implantación de la receta electrónica o la historia clínica digital.
En lo relativo a los profesionales sanitarios fue uno de los campos donde Ana Mato pudo en su momento presumir de haber logrado cierto consenso, aunque la falta de pasos para sacar lo acordado adelante había puesto al Consejo General de Enfermería y al sindicato de enfermería SATSE en disposición de romper el Pacto por la Sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud suscrito en julio de 2013. Acuerdos similares se firmaron con otros colectivos profesionales como médicos y farmacéuticos.
Otro de los momentos delicados de su mandato fueron las medidas impulsadas para frenar el déficit que derivaron en un cambio en las condiciones de acceso a la sanidad pública y el derecho a una tarjeta sanitaria, con el que quedaron excluidos los inmigrantes en situación irregular salvo para casos de urgencia, embarazos, atención pediátrica y por motivos de Salud Pública.
La exclusión de los inmigrantes de la atención sano desató importantes críticas
La reforma también propició un cambio del sistema de copago de los medicamentos que se compran en farmacia para establecer diferencias según la renta de cada ciudadano. Además, por primera vez obligó a pagar a los pensionistas (un 10% del precio de sus medicinas que, hasta ahora adquirían gratis) pero dejaba fuera a los parados sin prestación. Pero no fue el único copago, ya que Mato decidió ampliar la medida a determinados fármacos para patologías crónicas que los pacientes deben adquirir en las farmacias de los hospitales, a los productos ortoprotésicos y dietoterápicos, y al traslado no urgente en ambulancias. No obstante, el primero sigue en vigor pero la mayoría de comunidades no lo han puesto en marcha, y el resto no llegaron a ponerse en marcha ya que Mato desistió año y medio más tarde «ante la mejora de la situación económica».