DAVID RUIPÉREZ.- Dormir boca abajo puede aumentar el riesgo de muerte súbita en los pacientes epilépticos según desvela una nueva investigación publicada en la revista Neurology, la publicación oficial de la Academia Americana de Neurología. Una situación que guarda ciertos paralelismos con la muerte súbita del lactante.

“En pacientes descontrolados la principal causa de fallecimiento es la muerte súbita, que ocurre habitualmente durante el sueño y sin testigos”, asegura el autor principal del artículo científico, James Tao, de la Universidad de Chicago.

Los investigadores revisaron 25 estudios previos que incluían 253 muertes súbitas en las que se sabía cómo estaba situado el paciente en el momento del óbito. Encontraron que en un 73 por ciento de los casos, el paciente había muerto durmiendo sobre su estómago, mientras que un 27 por ciento estaban en otra posición. Analizando un subgrupo de 88 personas, los investigadores descubrieron que los menores de 40 años eran cuatro veces más propensos a dormir boca abajo en el momento del fallecimiento que los mayores de ese rango de edad. El 86 por ciento de los jóvenes dormían apoyados en su estómago y esa cifra era de seis de cada diez de los mayores de 40 años.

Los autores del estudio explican este mayor riesgo en los jóvenes porque es más probable que sean solteros y duerman sólo sin nadie presente cuando sufren el ataque mientras que una pareja puede ser consciente de lo que está ocurriendo y dar la vuelta a la víctima.

En 11 casos el paciente murió cuando estaba siendo monitorizado con un electroencefalograma y su posición fue grabada. En todos esos casos, los sujetos dormían en una posición decúbito prono y apoyados sobre su estómago en las convulsiones terminales.

Los especialistas apuestan por emplear detectores de muñeca o instalados en la cama para detectar estas muertes súbitas, pero tras este estudio “podemos decir razonadamente que los pacientes con epilepsia, especialmente aquellos que sufren crisis con convulsiones generalizadas, no deberían dormir boca abajo”, asegura Tao a Diarioenfermero.es.

Lo que no está tan claro es cuál es la explicación a esa correlación entre la posición y el riesgo de muerte. “No tenemos una explicación fisiológica clara. Es posible que un paciente que está inconsciente tras experimentar una convulsión sufra como consecuencia una obstrucción de las vías respiratorias y ahogamiento. Sin embargo, las evidencias del vínculo entre la posición decúbito prono son débiles. Otra posible explicación es que esta posición podría empeorar el control fisiológico de la función cardiorrespiratoria y el mecanismo que nos lleva a despertar”, añade el neurólogo.