RAQUEL GONZÁLEZ.- El Colegio de Enfermería de La Rioja ha emitido un comunicado en el que critica tanto la lentitud como el modo en que su gobierno se está tomando la implantación de la prescripción enfermera en la comunidad. Tras recibir el borrador de orden de acreditación, el pasado 17 de febrero, desde el colegio afirman que “Más vale tarde que nunca”, pero añaden que “para tan pobre resultado no había hecho falta tanto tiempo ni quedarnos a la cola de las comunidades que han regulado la acreditación”.
En sus alegaciones al borrador, insisten en que “es necesaria una rápida implantación en el sistema público de salud riojano de la capacidad de indicación, uso y autorización de dispensación de medicamentos y productos sanitarios de uso humano por parte de sus enfermeras y enfermeros, lo que requiere que todos ellos sean acreditados de oficio y de forma inmediata”. “La implantación total e inmediata en el sistema público de salud riojano -añaden- servirá de impulsor para su implantación también en los sectores privados”.
Además, apuntan cómo “en una situación de crisis como la de la actual pandemia, ha quedado patente que si las enfermeras riojanas, especialmente las de Atención Primaria, hubieran estado ya acreditadas y normalizada e incluida en el sistema la ‘orden de dispensación’ (RD 1718/2010de 17 de diciembre sobre receta médica y Orden de dispensación en su redacción definitiva), podrían haber agilizado aún más la asistencia a la población”. En su escrito, recriminan que ya han pasado “256 días desde que el Gobierno de La Rioja debía haber cumplido el mandato de la proposición no de la Ley del Parlamento riojano para que se hubiera establecido el procedimiento de acreditación”.
Asimismo, el colegio que preside Pedro Vidal recuerda la importancia de avanzar en esta cuestión que, desgraciadamente, lo hace de forma desigual en los distintos territorios. Y es que, subrayan desde la institución, “la acreditación nos proporcionará por fin la seguridad jurídica que necesitamos para seguir realizando muchas de las acciones cotidianas para las que el RD 954/2015 nos exige esa acreditación, seguridad jurídica de la que ahora carecemos”. A futuro, añaden, “la capacidad de prescribir de las enfermeras supondrá, cuando esté implantada en el sistema, un elemento importante del desarrollo profesional enfermero y una mejora en la calidad asistencial”. En su escrito, el colegio reitera su ofrecimiento a la Consejería para que cuenten con ellos en este proceso.
Es la resistencia al cambio.Las inercias de la profesión médica ralentiza esta medernización de la asistencia sanitaria por uncorporativismo trasnochado. Es difícil reconocer que ya no eres el único que prescribe. Este es el problema.