REDACCIÓN-. El fallecimiento de una joven enfermera de 28 años en Marbella ha consternado a la enfermería malagueña y ha sembrado un halo de pesar en las miles de compañeras y compañeros que luchan sin descanso contra los estragos que está causando el coronavirus en toda España.

El Consejo General de Enfermería, en representación de las 307.000 enfermeras y enfermeros españoles, ha querido trasladar su más sentido pésame y cariño hacia la familia de la enfermera y todos sus compañeros. Ana Belén, así se llamaba la joven, falleció en circunstancias dramáticas, pues se dirigía al Hospital Quirónsalud de Marbella desde Estepona, donde residía, para cubrir el turno de otra enfermera a pesar de que era su día libre. Según informa la prensa local, el coche de la enfermera se salió de la carretera sobe las ocho y media de la mañana del martes, un día de abundantes precipitaciones. Deja, además, una niña de corta edad.

En el seno del centro sanitario, la noticia ha caído como una losa y los habituales aplausos dedicados a los profesionales sanitarios se han tornado homenaje a la joven enfermera.

Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería, ha destacado “la figura de esta joven compañera que se dirigía a trabajar en el hospital, una gran profesional cuya muerte sentimos de corazón toda la enfermería española. Nos sumamos al dolor de sus compañeros, familiares y amigos”.