REDACCIÓN.- La fibrilación auricular es la arritmia cardíaca más común y el consumo prolongado de alcohol se ha asociado con su desarrollo. Lo cierto es que la relación específica y a corto plazo entre el consumo de alcohol y la fibrilación auricular es difícil de determinar debido a la frecuencia con la que se consume alcohol.
Sin embargo, una investigación publicada en ‘Annals of Internal Medicine’ refleja nuevas conclusiones sobre el consumo de alcohol y el riesgo de sufrir una fibrilación auricular discreta de forma inmediata y sustancial. El consumo se midió utilizando métodos objetivos y en tiempo real, eliminando sesgos de recuerdo o errores en el autoinforme y permitiendo la primera evaluación de las relaciones temporales.
Metodología
Para llevar a cabo este estudio, investigadores de la Universidad de California en San Francisco estudiaron a 100 adultos con fibrilación auricular intermitente que bebían un promedio de 1 bebida por mes para determinar si beber alcohol aumentaba el riesgo de un evento de fibrilación auricular discreto y a corto plazo. Los participantes usaron un monitor de electrocardiograma para registrar el tiempo y la duración de cada episodio de fibrilación auricular y un monitor de tobillo para registrar pasivamente su consumo de alcohol. A las 4 semanas, los investigadores compararon el número de episodios de fibrilación auricular y si los episodios fueron precedidos o no por el consumo de alcohol. Descubrieron que de los 56 participantes que tuvieron un episodio de fibrilación auricular, era aproximadamente el doble de probable que hubieran bebido alcohol en las 4 horas anteriores al episodio. La asociación fue un poco mayor con más bebidas y con un marco de tiempo de 6 horas, pero disminuyó con marcos de tiempo más largos.
La droga más consumida del mundo
Según los investigadores, estos hallazgos son ampliamente relevantes dado que el alcohol es la droga más consumida en el mundo. Estos datos sugieren que la probabilidad de que ocurra un evento de fibrilación auricular determinado no se debe únicamente al azar, sino que está influenciada por factores modificables que el paciente puede controlar.