MARCOS GÓMEZ JIMÉNEZ.- Por tercer año consecutivo, arranca ‘Pride Positivo’, una iniciativa que pone en valor los 40 años de activismo y resiliencia de las personas con VIH, un activismo que ha sido vector de diversos cambios sociales.
“En la actualidad una de cada 300 personas viven con VIH en España”, explica Reyes Belayos, presidenta de Cesida, durante la presentación de este gran proyecto que anima a las personas con VIH a estar orgullosos, a no avergonzarse de su condición.
Belayos ha remarcado durante la inauguración que se trata de un evento anual clave en la agenda estatal del VIH: “Haremos actividades artísticas, deportivas, formativas y reivindicativas para dar visibilidad a las personas con VIH y romper el estigma asociado. Estamos orgullosos de ser el altavoz de las personas con VIH”
Asimismo, la presidenta de Cesida, ha mencionado el último estudio del ‘Pacto Social por la No Discriminación y la Igualdad de Trato asociada al VIH de la División de Control de VIH, ITS, Hepatitis virales y Tuberculosis del Ministerio de Sanidad’, del que ha subrayado que el 20% de las personas con VIH evita el contacto físico por miedo al rechazo, a pesar de que el 95% tiene carga viral indetectable. El estudio también revela que el 60% siente angustia ante la posibilidad de transmitir el virus.
Por otra parte, Emilio de Benito, Periodista con más de 20 años de experiencia y vicepresidente de la Asociación Nacional de Informadores de la Salud (ANIS) ha recordado la discriminación que todavía enfrentan las personas con el VIH en el ámbito laboral. “Hay reglamentos centrados en enfermedades infecciosas que hoy en día aún no permiten trabajar a las personas con VIH como taxistas en la Comunidad de Madrid”, ha comentado De Benito. Asimismo, en las piscinas públicas sigue existiendo esto, si por algún motivo la condición de una persona con VIH fuese conocida, por poder, podrían negarle el paso.
Por todo esto, ha insistido lo esencial que sigue siendo hacer a las personas con VIH visibles. “Es fundamental normalizar nuestra presencia en todos los sectores de la sociedad: que sea común ver a personas con VIH como presentadores de televisión, miembros del parlamento artistas…El papel del Pride Positivo es hacer que visibilidad tengo un impacto real, y no debe haber limitaciones a nuestras capacidades por culpa del estigma», ha insistido De Benito.
El papel de la enfermería
Los ponentes coincidieron en la importancia de que el personal este informado sobre como es la situación actual del VIH. “El rol de las enfermeras debe ser también el de generar espacios seguros, para que las personas puedan abrirse y trabajar codo a codo con los pacientes la promoción de la salud”, ha afirmado Oliver Marcos secretario general de Cesida y protagonista de la campaña de promoción “Nuestras vidas rompen estigmas”. Durante su intervención se ha centrado en recordar que no todas las personas con VIH enfrentan el mismo nivel de discriminación, especialmente las mujeres y las personas racializadas, que tienen mayores dificultades para llegar a ciertos espacios.
“Una persona con VIH me contó que lo único que recuerda del día que le confirmaron esta condición, fue el reconfortante y cálido abrazo que le dio su enfermera”, ha recordado Marcos, que ha asegurado que la enfermera no solo debe tratar la enfermedad, también validar los sentimientos de los pacientes y ayudarle en su proceso de empoderamiento para que sea capaz de controlar su salud y de autocuidarse. “Esto incluye que se preocupen de aspectos tan cotidianos como la alimentación, las preocupaciones personales”.
Es ahí donde entra el papel de las enfermeras como referentes en la educación de la salud y en como su sus cuidados y apoyo humano son imprescindibles para las personas con VIH. “A veces es tan simple como un abrazo”, ha hecho hincapié.
“La administración pública tiene que garantizar urgentemente la formación de las personas en temas relacionados con VIH”, ha recordado De Benito.
Es más, ha mencionado que la enfermera empática puede convertirse en un apoyo crucial en cuanto a la hora de afrontar la adherencia. “aunque puede parecer sencillo, tomar la medicación diaria puede ser complicado para quienes viven en pisos compartidos y no quieren que los demás sepan de su condición por miedo al rechazo o a ser expulsados”, ha destacado De Benito.
Por otro lado, Belayos ha aclarado que las personas con VIH son las que mayor adherencia tienen al tratamiento, pero “es importante seguir luchando contra el estigma para que esa adherencia no se vea comprometida”, ha remarcado.
Actividades
Durante la jornada se ha puesto en valor las actividades, principalmente la marcha que se va a celebrar el 19 de octubre.
Gerjo Pérez, director de la Cimemateca Pedro Zerolo, ha hablado sobre los ciclos de cine que se van a llevar en varios espacios como cines o centros de mayores con la finalidad de sensibilizar sobre el VIH. Este ciclo comenzará con «Alguien que cuide de mí», con la presencia de sus directoras, Elvira Lindo y Daniela Fejerman, para un coloquio en el Palacio de la Prensa.
Asimismo, la artista Gema Vilches, que participará de nuevo en Arte Positivo 2024, ha destacado el impacto del arte en la lucha contra el estigma: «El arte tiene el poder de acercar a las personas y romper barreras”.