ÁNGEL M. GREGORIS.- “Lo invisible tiene igual o más importancia que el tratamiento farmacológico a la hora de la mejora de los pacientes”. Esta es una de las hipótesis que quiere confirmar la enfermera Lucía Pareles con su proyecto de investigación, ‘El poder de lo invisible’.
¿Y qué se entiende por lo invisible? “Es lo que no se ve, pero se siente. En definitiva, la esencia de la enfermería. Lo invisible es lo que nos hacer ser lo que somos a los enfermeros. Estamos encargados de cuidar no sólo físicamente, sino psicológicamente y creo que muchas veces lo pasamos por alto porque vamos más rápido o tenemos otras cosas en mente”, explica Pareles.
Aunque todavía no ha podido realizar la investigación en el hospital, tiene en mente hacerlo en un futuro, pero está convencida de la importancia de estos detalles. “A lo mejor, simplemente el darle la mano a un paciente o darle una tila y sentarte a hablar con él cinco minutos es suficiente para que ese día esté más tranquilo, lleve mejor su enfermedad y pueda afrontar las cosas de otra forma”, resalta la enfermera.
Subjetivo y universal
Para ella, “el sufrimiento es subjetivo y universal, por lo que está en nuestras manos rescatar el poder de los sentidos y dejar de lado que el ritmo de trabajo haga que dejemos de preocuparnos por esto”. Asimismo, considera que las enfermeras “debemos escuchar lo que se dice y lo que no se dice, tenemos el deber de oler y palpar las necesidades no sólo de nuestros pacientes, sino también de sus familiares y los profesionales que trabajan junto a nosotros porque también son personas vulnerables”.
Pareles recalca la necesidad de ponerse en la piel del otro y darse cuenta de que “estamos trabajando con personas y ellos no han elegido estar donde están, pero nosotros sí hemos elegido estar ahí para cuidarlos”. “Lo más importante es no quemarte y saber que la responsabilidad de que ellos estén bien está en tus manos”, destaca.
La enfermera, que quiere poner en valor esas pequeñas cosas que no se ven pero que son esenciales, afirma que “todo lo que se pueda hacer siempre te lo van a agradecer porque la enfermedad que estén pasando puede tener mejor o peor solución, pero si nosotros nos entregamos, ellos lo van a saber y van a estar tranquilos por la confianza que genera la relación entre enfermero y paciente, que no se debe perder”.
“Gracias a esta manera de cuidar es como se conseguirá una sanidad excelente, una sanidad centrada en las personas y en la que las emociones no estén metidas en un armario, sino que formen parte del día a día”, concluye.
Basada en en el poder de lo imposible he quedado motivada por lo que he hecho un escrito relacionado en el cuidado del paciente oncológico realmente eres mi inspiracion podemos escribirnos y conferencias me puedes dar tus criterios al respecto a mi tema y publicamos junta .
«… lo esencial es invisible a los ojos» según el escritor francés de Saint Exupéry. Estoy segura que la esencia de nuestra profesión es el cuidado, el cuidado holístico nos ha permitido una enfermería más humanizada. Es así, que mediante el cuidado brindamos lo más sustancial y valioso de nuestra profesión. Son esas pequeñas cosas que hacen esencial a nuestra profesión y que nos hacen esencial para mantener o mejorar la salud. A trabajar mucho para forjar la relación entre enfermero y paciente, y la empatía en nuestros cuidados. Le agradezco enfermera Lucía pareles por desear demostrar el poder de lo invisible, muchos saludos soy una estudiante y futura enfermera. ¡EL PODER DE LO INVISIBLE ES ESENCIAL 🙂 !
Importante; viviendo esta actitud de atención a lo ¨oculto¨ expresamos nuestro anhelo de vivir lo que todos somos: seres dignos y valiosos. Sí, precisamos estar despiertos para recibir y atender, para «estar presentes», para vivir cada día con novedad y sentido…. Todo un reto para cada jornada. Adelante Lucía. ……
Enhorabuena Lucia por expresar lo que mucho de nosotros intentamos hacer en nuestro trabajo diario bajo la presion de la productividad y el modelo de coste- efectividad. Porque trabajamos con personas, y porque nuestra esencia es la de cuidar de una forma integra y holistica, pienso que debemos empezar a movilizarnos para que no sigam cortandonos las alas y realizemos trabajos tecnicos y centralizados.
Si por una enfermeria con cuidados humanizados!
Los cuidados Invisibles,otra dimensión de las tareas del cuidar. Es el tema que hemos elegido para enviar al CIE. Son tan importantes y necesarios que ya ha habido un congreso solo para ellos en 2013 en Zaragoza.
Que haya gente que los rescate y ponga en valor dice mucho de las enfermeras.
Un abrazo y sigue adelante.
Enfermera de la promoción de 1982.
Soy enfermera desde hace 35 años y lo que comentar lo he llevado a cabo desde el primer día y teniendo lo muy claro de que es cierto todo lo que dices. No curamos pero sí que ayudamos a mejorar muchas veces con un simple gesto, caricia , sonrisa etc. Ojalá consigamos que todos los enfermeros seamos capaces de esa complicidad tan bella.
Increíble!
Un artículo muy bueno y mis más sinceras felicitaciones a la enfermera Lucía Pareles. Creo que en esta vida hace falta más personas como ella, que quieran ayudar y no sólo dedicarse a cumplir con su trabajo. La mente es un arma poderosa y puede utilizarse para derrotar una enfermedad o para sucumbir a ella… y como bien dice ella, si se cuida la mente, si se cuida lo invisible, todo es posible. Con esto no quiero decir que se pueda vencer una enfermedad incurable, pero al menos puedes sentir algo de luz en esa oscura habitación si te ayudan a hacerlo.
Gracias Lucía y espero que todo el mundo vea que eres un ejemplo a seguir como enfermera.
Un abrazo!