Elena Fernández es la gerente de Cuidados del Servicio Madrileño de Salud y la enfermera que ocupa el más alto cargo en la estructura del Servicio Madrileño de Salud (Sermas). Un papel que no debe ser fácil pero que para ella es un reto apasionante.

¿De cuántas enfermeras eres la máxima responsable en Madrid?

El Servicio Madrileño de Salud tiene más de 23.000 enfermeras. Es una cantidad de personas importante y, sobre todo, lo que yo pongo en valor es lo que aportan al Servicio Madrileño de Salud. Porque aportan no solo su trabajo, sino también su alma, y eso hay que tenerlo muy en cuenta. Las enfermeras aportamos ciencia, cuidados y un poquito de nosotras mismas y para mi representarlas es una responsabilidad muy grande.

Madrid, además, ha apostado por enfermeras en gerencias de hospitales

Yo creo que las enfermeras somos buenas gestoras, igual que el resto de los gestores. Debemos liberarnos del tema de si eres gestor, ¿cuál es tu categoría profesional? Creo que hay que hablar de si eres buen gestor o mal gestor, tienes una preparación o no… La Comunidad de Madrid, en este caso nuestra consejera de sanidad, Fátima Matute, apuesta por las enfermeras gestoras y ha colocado ahí al frente de hospitales a Almudena Santana y Alejandro Lendínez, dos grandes compañeros que creo que van a hacer una labor fundamental en los puestos en los que están desarrollando.

En cambio, en la estructura de la administración de la función pública, se da la paradoja de que un licenciado en Periodismo, por ejemplo A1, y de repente podría ocupar según qué cargos y las enfermeras por ser A2 no. ¿Qué opinas al respecto?

Yo creo que como tú dices creo que cuando dos profesionales tienen los mismos requisitos académicos deben tener la misma categoría y si no la tienen es una desigualdad. Y evidentemente la consejera apoya el A1, lo apoyan otros consejeros, pero creo que es el Ministerio quien se tiene que posicionar, y hacerlo bien, no sólo hacer un reconocimiento expreso del A1, sino también
dotar a las comunidades autónomas de que eso se pueda hacer real.

En lo que también ha habido novedades últimamente es en la Ley del Medicamento, ¿cuál es tu opinión sobre la prescripción enfermera?

Creo que lo importante de la prescripción no es lo que hacemos las enfermeras prescribiendo un medicamento, sino
todo lo que acompaña la prescripción del medicamento. Y la enfermera no solo indica un fármaco, sino que hace valoración del paciente, planificación de cuidados, educación sanitaria, evaluación y luego hace prescripción. Y eso es lo que les tiene que entrar en la cabeza a muchas de la gente que nos dice que no podemos prescribir. Además, creo que no debemos confundir al ciudadano. El ciudadano tiene que saber para qué estamos. Las enfermeras y las enfermeras estamos para resolver los problemas de salud. Si realmente nos creemos esa frase del paciente en el centro del sistema, al paciente le tiene que atender el profesional que le resuelva con mayor eficiencia, con mayor eficacia y en menor tiempo, porque él no quiere esperar.

¿Cuál es la vía que va a seguir Madrid para potenciar el rol de las enfermeras en el sistema sanitario?

Yo tengo un equipo interno con tres personas de diferentes ámbitos Atención Primaria, hospitalaria y de investigación; y la estrategia del Servicio Madrileño de Salud y de Cuidados es primero, visibilizar a las enfermeras. Que se nos vea y que sobre todo lleguemos al ciudadano y sepamos lo que podemos aportar con una doble visión: el ciudadano y los propios profesionales. Luego tenemos todo lo que es la normalización de las de los procesos asistenciales, tanto en Atención Primaria, como en el Summa, como en hospitalaria. Es también muy importante la investigación y la innovación.

Y una valoración de lo que no se ha hablado del ámbito de la sanidad privada y de que sería ideal que los técnicos asumieran las funciones ante la falta de enfermeras.

Yo creo que, igual que las enfermeras tenemos que desarrollar nuestras competencias, hay otros profesionales que también tienen que desarrollar las suyas, pero esas competencias serán delgadas. Yo creo que todos cabemos y nadie
sustituye a nadie, ni una enfermera puede ser sustituida por un TCAE, ni un médico puede sustituido por una enfermera. Cada uno ocupamos nuestro rol y eso es lo que tenemos que garantizar.