REDACCIÓN.- Cuatro profesionales de Enfermería de Córdoba, un médico de familia y una cardióloga, han sido los protagonistas de las V Jornadas de Rehabilitación y Prevención Cardíaca organizadas por la Asociación de Pacientes Cardíacos de Córdoba (Aspacacor) y la Unidad de Rehabilitación Cardíaca del Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba, que se han en el salón de actos de la Diputación Provincial.

Tras las presentación de la jornada a cargo de Mercedes López-Pardo, enfermera jubilada y vocal de Aspacacor, se han abordado una serie de cuestiones entre las que las enfermeras han resaltado la importancia de una correcta salud sexual y alimentación para la prevención y tratamiento de este tipo de patologías, al igual que han ofrecido recursos para la mejora de los hábitos de vida de estos pacientes y cómo los cuidados de Atención Primaria ayudan a los afectados de insuficiencia cardíaca.

Consulta salud sexual

En concreto, Carmen Jurado, sexóloga y enfermera responsable de la consulta de Salud Sexual del Hospital Reina Sofía puesta en marcha hace doce años, ha apostado por seguir manteniendo Sexo con corazón, el título de su intervención que refleja que, aunque los pacientes cardíacos pueden tener dificultades con su respuesta sexual, esto no significa que su sexualidad desaparezca ni deba dejarse al margen.

Seguidamente, Guillermo Molina, enfermero, profesor en la Universidad de Córdoba y Director del Máster en Nutrición Humana, además de investigador principal del grupo de investigación Estilos de Vida, Innovación y Salud del Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba (IMIBIC); ha explicado los recursos disponibles para la mejora de los hábitos de vida de estos pacientes.

Mientras que María José de la Torre Barbero, enfermera de la UGC de Cirugía Cardiovascular del Reina Sofía y miembro del grupo de investigación NURSE -Nutrición: Reunión Sur de Enfermeras, que es el grupo andaluz dedicado a la investigación en cuidados de la Asociación Española de Nutrición y Dietética AdENyD- ha resaltado los beneficios del ejercicio y de una buena alimentación en la salud cardiovascular.

Por último, Beatriz Méndez, enfermera y coordinadora de Cuidados de la UGC Fuensanta del Distrito Córdoba-Guadalquivir, ha desgranado los cuidados en insuficiencia cardíaca que se prestan desde los centros de salud cordobeses.

Coordinación entre centros de salud y hospitales

Para concluir la jornada, se ha desarrollado una mesa redonda con participación de distintos profesionales del ámbito hospitalario y de atención primaria, así como pacientes; en la que se ha realizado una puesta en común sobre la coordinación existente entre la cardiología hospitalaria y los centros de salud. En esta mesa se evidenció que no existen protocolos para derivar pacientes de una forma eficiente en todos los casos, pues si bien es cierto que se derivan a rehabilitación cardíaca los pacientes con pronóstico más grave o moderado; no se suele derivar a los que presentan episodios repetitivos más leves, aunque desde la enfermería se apuntó que, según los últimos estudios, son precisamente los pacientes menos graves los que más vuelven al hospital, dado que los más graves suelen cumplir más a rajatabla su tratamiento y modifican sus hábitos hacia un modo de vida más saludable.

Papel de la Enfermería y factores de riesgo

Estas jornadas han contado con la asistencia, entre otros, de la presidenta del Colegio de Enfermería de Córdoba, Natalia Pérez, que con su presencia ha querido respaldar la importancia que las enfermeras vienen jugando en la prevención y cuidados cardiovasculares, en el marco de estas jornadas «centradas en el paciente y donde también se ha puesto en valor la labor que realiza Aspacacor, en beneficio de toda la sociedad cordobesa», ha resaltado.

En definitiva, unas jornadas centradas en la prevención y atención de las enfermedades cardiovasculares, que siguen siendo una de las principales causas de mortalidad entre la población, aunque existen recetas para prevenir el riesgo cardiovascular o reducir sus consecuencias. No en vano, y como también se ha quedado evidenciado durante estas jornadas, parte de los factores de riesgo son modificables en beneficio de la salud con ejercicio, control y un estilo de vida saludable.

Todo ello para hacer frente, como recomiendan las enfermeras, a los factores de riesgo entre los que se encuentra el tabaco, el colesterol, la hipertensión, la diabetes, la obesidad, el sedentarismo y el estrés; y donde algunos expertos ya apuntan que cuestiones relacionadas con la salud mental, como la depresión, también tienen una incidencia negativa directa.