A. ALMENDROS.- Más de 250 enfermeras de todo el mundo han compartido su experiencia trabajando en primera línea de la pandemia de COVID-19 en un webinar en el que han colaborado el Consejo Internacional de Enfermeras (CIE) y Nursing Now.
Entre los principales temas que se han tratado han estado lo bien o mal preparados que estaban los países para la pandemia, la repercusión del COVID-19 en el estado físico y mental de las enfermeras, las carencias inmediatas y a largo plazo en materia de dotación de personal y las condiciones en las que están trabajando las enfermeras, así como la necesidad de sostener y cuidar a las enfermeras, muchas de ellas han trabajado gran cantidad de horas seguidas sin poder ver a sus familias durante semanas, los insultos o agresiones que han soportado y la necesidad de realizar cambios y contar con una mayor participación de las enfermeras en el diseño de los sistemas sanitarios del futuro. “Las enfermeras han proporcionado un liderazgo fuerte y han encontrado fórmulas innovadoras de afrontamiento durante la pandemia. No creo que la gente sea verdaderamente consciente de la cantidad de innovaciones que han aplicado las enfermeras durante esta pandemia como por ejemplo el establecimiento de grupos de formación de médicos y enfermeras para cuidar de pacientes en posición prono y la realización de cambios que han permitido una mayor duración de los EPI. Las enfermeras siempre están buscando soluciones innovadoras y creativas para resolver sus problemas y creo que es algo que no se reconoce lo suficiente. No se hacen idea de lo importante que es escuchar a las enfermeras”, ha afirmado Annette Kennedy, presidenta del CIE.
Helen Clark, copresidenta del Panel Independiente para la Preparación y Respuesta ante Pandemias y ex primera ministra de Nueva Zelanda, ha mostrado su preocupación “por no tener personal que cuide de las personas porque sin enfermeras en la fuerza laboral sencillamente no hay fuerza laboral”. Asimismo, ha recordado que la pandemia “ha puesto al descubierto las brechas en muchísimos sistemas de salud, en particular la escasez de equipos de protección individual, que representa una amenaza para la salud y el bienestar de las enfermeras. Nunca olvidaremos las imágenes que hemos visto en los medios de comunicación en algunos países mostrando a enfermeras literalmente con bolsas de basura en lugar de con protección adecuada o cuando hemos oído hablar de la necesidad de reutilizar las mascarillas N95 numerosas veces. Estoy convencida de que el hecho de que sencillamente no haya suficientes enfermeras en el mundo, es decir una brecha de millones de enfermeras, también provoca agotamiento. También creo que estas brechas contribuyen a su manera a generar enfermedad y muerte”.
Por su parte, Howard Catton, director general del CIE ha resaltado que tras haber escuchado los mensajes de las participantes “ha quedado claro que necesitamos acciones e inversiones para apoyar a nuestros sistemas sanitarios bajo presión. Los participantes han manifestado claramente que la escasez de enfermería no solo repercute en la fuerza laboral correspondiente, sino que también lo hace en la seguridad y la calidad de los cuidados. La enfermería no ha de desaparecer de la escena o quedar marginada cuando finalice la pandemia. Este reflector que tenemos ahora sobre nosotros ha de permanecer ahí y las enfermeras tienen que seguir ocupando una posición central en el diseño de los sistemas de salud del futuro. Cuando la Sra. Clark lleve su informe a la Asamblea Mundial de la Salud el año que viene, el CIE desearía que tuviera incorporados indicadores de manera que sepamos si estamos progresando, y que nunca nos encontremos despertándonos ante una escasez de seis millones, sino que sepamos si estamos haciendo lo suficiente o no y tenemos que actuar”.
El CIE ha instado a los gobiernos al establecimiento de fondos para educación en salud y oportunidades de reconversión profesional con el fin de que las personas que han perdido sus puestos de trabajo a causa de las alteraciones que ha provocado la pandemia en numerosos sectores puedan recibir formación para convertirse en las enfermeras registradas del futuro.
Este tipo de eventos contribuye sin duda, a revisar la respuesta del mundo a la pandemia de COVID-19 y en particular la respuesta de la Organización Mundial de la Salud. Cualquier enfermera que desee aportar sus experiencias al panel puede hacerlo en el siguiente enlace: https://theindependentpanel.org/your-contributions/.