GEMA ROMERO.- Un grupo de enfermeras del País Vasco han desarrollado un ensayo clínico en el que han descartado la eficacia de la aplicación de cloruro de etilo en aerosol sobre la piel previa a la punción arterial para reducir la intensidad del dolor en las gasometrías arteriales. Tras 11 de meses de ensayo, con la participación total de 126 pacientes, sus resultados se acaban de publicar en la revista Emergencias.
El análisis de sangre arterial es una prueba habitual en los servicios de urgencias para evaluar la función respiratoria de los pacientes. A pesar de estar recomendada la administración de anestesia local para evitar el dolor al realizar la punción arterial, no suele emplearse, quizá por la necesidad de lograr resultados inmediatos y por la presión asistencial.
Por su parte, el cloruro de etilo es un anestésico tópico empleado para la realización de técnicas invasivas rápidas, en cirugía menor y medicina deportiva. Su mecanismo de acción se basa en la reducción brusca e inmediata de la temperatura de los tejidos en los que se aplica, produciendo un efecto anestésico inmediato por frío.
Tal y como señalan Sendoa Ballesteros-Peña, Irrintzi Fernández-Aedo y Gorka Vallejo-De la Hoz, enfermeros del hospital de Basurto y autores del estudio “a pesar de que estas indicaciones teóricas parecen adecuadas para su empleo durante las punciones arteriales, existen muy pocos estudios que lo haya investigado de una forma exhaustiva”.
Por este motivo, un grupo de enfermeras de urgencias del hospital de Basurto, bajo la coordinación de la Facultad de Medicina y Enfermería de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) han desarrollado un ensayo clínico para evaluar si la aplicación de cloruro de etilo en aerosol sobre la piel previa a la punción arterial resulta una medida eficaz para reducir la intensidad del dolor en las gasometrías arteriales.
Ensayo integrado en el proyecto DIASURE
En este ensayo clínico -enmarcado en el Proyecto DIASURE, centrado en la evaluación del dolor iatrogénico asociado a las técnicas de enfermería de urgencias- se asignaron pacientes con necesidad de una analítica de sangre arterial de manera aleatoria a uno de los dos grupos de tratamiento: a un grupo se les administró localmente cloruro de etilo de forma previa a la extracción de sangre, mientras que al otro grupo se les aplicó un placebo. Posteriormente a la extracción de sangre los pacientes graduaron la intensidad de dolor experimentado mediante una escala analógica de evaluación.
Participaron voluntariamente en el estudio un total de 126 pacientes, que fueron reclutados durante un periodo de 11 meses. El análisis posterior de los datos reveló que no existieron diferencias en el nivel de dolor experimentado por los pacientes en función del producto empleado (cloruro de etilo o placebo), por lo que no se pudo confirmar que la aplicación de cloruro de etilo fuese una estrategia eficaz para la reducción del dolor iatrogénico por punción arterial.