ANA MUÑOZ.- Las terapias que han aparecido durante los últimos 15 años (especialmente las biológicas) para el tratamiento de enfermedades reumáticas han cambiado la evolución de la enfermedad inflamatoria crónica, suponiendo un antes y un después en la historia de la Reumatología. Un arsenal terapéutico que ha conseguido controlar la actividad inflamatoria, evitando la afectación y deformidad articular que la enfermedad produce en el paciente.

La proliferación de este tipo de fármacos hace necesario que los enfermeros de Reumatología, cuyo papel es esencial en la educación sanitaria del paciente y su familia, estén capacitados para instruirles en la correcta administración de las terapias, tanto biológicas como no biológicas. Para conseguir esa capacitación de la enfermería, el Grupo de Trabajo de Enfermería de la Sociedad Española de Reumatología (Gteser) ha elaborado el primer manual de España dirigido a facilitar el conocimiento, la formación y el manejo de los diversos dispositivos de inyección dirigidos al paciente crónico con enfermedades como artritis reumatoide, artritis psoriásica, espondilitis anquilosante y osteoporosis, entre otras. Su finalidad es puramente educativa: enseñar a los enfermeros a formar, a su vez, a los pacientes con enfermedad reumática en el automanejo de los tratamientos.

La responsable de la Consulta de Enfermería de la Unidad de Reumatología del Hospital Sant Joan de Alicante, Amelia Carbonell, ha sido la coordinadora del manual, en cuya elaboración ha participado más de una veintena de personas. «Todo es producto de la experiencia diaria en la práctica clínica con los pacientes. Vimos que existía la necesidad de una herramienta así para asegurar el manejo de estas terapias», ha explicado Carbonell a Diarioenfermero.es.

«Lo hemos enfocado como una herramienta de consulta diaria, ágil, práctica. Es muy visual y muy didáctico, para que los enfermeros -tanto de Atención Especializada como de Primaria- que no estén familiarizados con ese tipo de terapias accedan fácilmente a la información, las características y las recomendaciones que hace Enfermería en el seguimiento de este tipo de tratamientos». Lo más complicado, según Carbonell, ha sido «concretar la idea, el objetivo, saber qué contenido queríamos incluir y a quién nos dirigíamos. También fue difícil conseguir financiación para editarlo. Dos laboratorios farmacéuticos han colaborado con los gastos de impresión. En cuanto a los autores y colaboradores, nadie ha cobrado nada».

El objetivo ahora es extender el uso del manual a cada consulta de enfermería de Reumatología y de Atención Primaria de España. Para ello, se han impreso 1.500 ejemplares y ya hay previstas charlas formativas en diferentes centros. Además, explica Carbonell, «posiblemente en el plazo de unas semanas se cuelgue en algunas páginas web de sociedades científicas».