La enfermera española Fátima Diame ha logrado la medalla de bronce en salto de longitud en el Campeonato del Mundo de atletismo en pista cubierta, gracias a un vuelo de 6,72 metros. La prueba se disputó en Nankín (China), donde repitió el mismo éxito que el año pasado en el Mundial de Glasgow (Escocia). El oro fue para la estadounidense Claire Bryant (6,96) y la plata para la suiza Annik Kalin (6,83).

Su mejor intento, ese que le valió para subir al cajón de los mejores, fue el primero. Diame se desplazó por la pista a más de 33 km/h, apuró casi al máximo la batida y saltó hasta los citados 6,72. «Es una marca que pueden saltar todas. Yo no estaba para nada tranquila. Tenía el pulso a un millón, pero no lo ha saltado. Yo también me veía capaz de saltar más, no ha podido ser, pero muy bien», explicó la valenciana a la Real Federación Española de Atletismo (RFEA).

Y es que tuvo que sufrir. Mucho. Porque Diame no fue capaz de repetir un brinco similar. Su segundo mejor intento, que llegó en la tercera tentativa, fue de 6,50 metros, a 22 centímetros de su bronce. En el resto de saltos válido, la española tocó tierra en 6,46 y en 6,41. Pero tampoco necesitó más.

Cambio técnica

Lo que es muy curioso es que Diame ha logrado el metal cambiando la técnica de salto. Por hacerlo sencillo, el año pasado, en Glasgow, fue tercera impulsándose con la pierna derecha; en este 2025, lo ha conseguido con la izquierda. Y todo acarreado por una lesión invernal en su talón derecho.

Dominio estadounidense

La ganadora del concurso fue la americana Claire Bryant, que dominó con mano de hierro toda la prueba. Se puso al frente, en el primer salto y, poco a poco, fue ajustando la técnica para alcanzar el 6,96, que le valió el oro y su mejor marca de siempre. La plata, por su parte, se fue a Suiza, y casi lo hace para España. Annik Kalin le arrebató a Diame el segundo puesto en su sexto y último intento válido de 6,83.