A. ALMENDROS / D. RUIPÉREZ.- ¿Qué hace falta para investigar? Fidel López, secretario del Colegio de Enfermería de Cáceres, lo tiene claro y destaca, en primer lugar, la formación. Además, hace hincapié en la importancia de optar a las becas de investigación e insiste en que la investigación enfermera no requiere de grandes inversiones, pero exige de un baremo distinto al que se está aplicando actualmente.

¿Cómo despierta en ti esa vocación investigadora?

Como persona inquieta que soy, he pasado por todos los pilares de una enfermera que es la asistencia, la gestión, la investigación y la docencia. Tuve la suerte de recalar en un hospital grande de Madrid que era el Ramón y Cajal en el cual me aventuré en la parte asistencial. Allí quise hacer mi primer pinito de investigación sin tener ni idea. Como anécdota os cuento que bajé al departamento de Estadística pensando que me iban a recibir y un señor que había allí y era súper potente, luego me enteré de que pensó que cómo iba a perder el tiempo con un “mindundi” que llevaba cuatro preguntas sobre el pie diabético y la inquietud de cuatro enfermeros de turno de tarde que queríamos hacer algo más allá de la parte asistencial. Este fue el primer batacazo que me dio la investigación.

Pero no lo dejé ahí. Llegamos a publicar un pequeño artículo en la revista ROL en el año 2002 sobre el pie diabético. Además, siempre he creído en que hay que formarse, y posteriormente me formé en gestión y en investigación. Una vez asentado en una unidad que era preciosa para iniciar proyecto de investigación, como era la unidad de ictus, me decidí a empezar los proyectos de investigación.

Has publicado en la web del Instituto de Investigación el Consejo General de Enfermería una minipíldora de información sobre investigación cualitativa que ayudará a otros compañeros. ¿Qué es lo más importante de lo que reflejas ahí?

La investigación cuantitativa está mucho más desarrollada. De hecho, en todos los Grados aparece una asignatura de Metodología de la Comunicación o de Bioestadística, la cual obviamos un poco las enfermeras porque nos resulta un poco farragoso. La investigación cualitativa debe contar con una buena formación. Yo defiendo que detrás exista una metodología rigurosa que dé calidad a la investigación.

Las características de esta investigación es lo que queremos trasladar a nuestras compañeras en esas minipíldoras. Me consta que el Consejo de Enfermería, a través de su Instituto de Investigación y de su Instituto de Formación ISFOS quiere empujar un poco la formación y la investigación.

Pero ¿cuál sería ese primer paso?

Lo primero que tenemos que hacer es formarnos. También es cierto que no hace falta saber de todo, sino que buscándote un buen equipo de compañeros e incluso aprovechando las unidades de asesoramient de investigación que tienen ahora muchos hospitales, los colegios de enfermería e incluso el propio Consejo de Enfermería pueden empezar a investigar. Y las deficiencias que tengamos nosotros a nivel formativo intentar suplirlas integrando en nuestro equipo a gente de otra disciplina o profesionales con otro tipo de conocimiento. Por eso yo siempre animo a tener una base de conocimiento que es un poco lo que estamos intentando hacer con estas minipíldoras y luego realizar algún curso un poquito más extenso de investigación cualitativa. Pero lo importante es que las instituciones apoyen con asesorías específicas para enfermería porque tenemos ciertas peculiaridades.

Aunque haya enfermeros que estéis publicando mucho, la mayoría de las enfermeras tienen dificultades para hacerlo, ¿qué es lo que falta?

Lo primero es la falta de formación, que en parte ya se está supliendo cuando salen del Grado con asignaturas en las que se genera esa metodología de investigación. La falta de tiempo es otra de las trabas. Creo que existe un compromiso por parte de las direcciones de enfermería, pero además se debería cambiar el chip de que investigar es hacer un bien para los cuidados de los pacientes que atendemos y que, por tanto, tan importante es una cosa como otra. Es decir, trasladar esa investigación en cuidados tiene que ser importante.

Yo he intentado hablar con las direcciones de enfermería en que cuando sobraba un pull en vez de repartir y quedarnos con cuatro pacientes cada uno, quizás podríamos llevar a seis pacientes y liberar a uno del equipo para que hiciera una búsqueda, un registro o avanzara en la investigación que llevásemos a cabo en la unidad. Luego también necesitamos un apoyo claro de las instituciones. No nos pueden medir con la misma vara que tienen para otras especialidades donde cuentan con mucha más experiencia en investigación porque si hacen esa comparación nunca podremos obtener financiación. También quiero defender que la investigación enfermera no necesita grandes inversiones, pero sí es cierto que debemos de tener cierta diferenciación en determinados baremos.