JUANJO CAMPILLOS / IRENE BALLESTEROS.- Un año más la Asociación de Enfermería Comunitaria (AEC) celebra su congreso. Este año, bajo el lema «Vulnerabilidad y Salud Comunitaria: una nueva era para los determinantes en salud», más de 200 enfermeras se han dado cita en el Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de Madrid (COEM), donde han puesto el foco en exponer las causas y las herramientas necesarias para gestionar los determinantes que condicionan nuestra salud.
A nivel social nos encontramos en un contexto en el que es necesario trabajar con la perspectiva de género. Este congreso es un espacio de referencia a nivel nacional e internacional para reflexionar bajo esta mirada. Por ello, diferentes ponentes y expertos han compartido experiencias y han puesto en común conocimientos que enriquecen la profesión.
Uno de los principales temas que ha centrado este encuentro es el género como condicionante de la salud, donde la enfermería cuenta con un claro protagonismo. «Lo que nos interesa a las enfermeras es que desde los diferentes estamentos, es decir, desde el Ministerio de Sanidad, el ámbito comunitario y a nivel local, y desde los centros de salud y, por supuesto, desde la ciudadanía desde los activos de salud, prestemos atención a cómo afecta el género como determinante de la salud de toda la comunidad, en qué medida y cómo las enfermeras debemos trabajar teniendo esa perspectiva que no debemos olvidar nunca, una perspectiva de genero a diferentes niveles», afirma Rocío Loma-Osorio, enfermera especialista en Atención Familiar y Comunitaria del Centro de Salud de Arnedo, de La Rioja y vocal por La Rioja de la AEC.
Mujeres y salud
El género impacta de forma decisiva en la salud de las mujeres, pero, ¿en qué aspectos las mujeres tienen peor salud que los hombres? «En cualquier estudio a nivel internacional, a nivel de Comunidades Autónomas, podemos ver que las mujeres están en peor situación, a nivel de esa morbilidad entre hombres y mujeres diferencial en las enfermedades más prevalentes. No solo debemos centrarnos en los cánceres ginecológicos, las mujeres también padecen cánceres comunes como son los de garganta, digestivo… y en temas de salud mental podemos ver también diferencias entre hombres y mujeres. ¿Por qué estamos en peor situación? Porque el género es un determinante social y esto quiere decir que va asignado a ese rol que nos atribuyen según con que sexo nacemos. El género como determinante social está relacionado con la estructuración de la sociedad y eso está relacionado con situaciones de poder, acceso a diferentes recursos, económicos, sociales incluso materiales. A las mujeres hasta hace muy poco tiempo, menos de 40 años, las mujeres teníamos invisibilidad en al ámbito publico, por lo que nuestro acceso y utilización de esos recursos eran distintos y eso nos posiciona en una situación de desventaja. Esos son los determinantes que se cruzan con el género y hacen que estemos en peores condiciones y seamos más vulnerables, por tanto tenemos que estar con el hándicap de entrada de estar en los equipos y puestos directivos que toman las decisiones sobre esos recursos», explica Rosa Mª López Rodríguez, directora de programas del Observatorio de Salud de Mujeres de la Dirección General de Salud Pública del Ministerio de Sanidad.
En este contexto, el Observatorio de Salud de Mujeres de la Dirección General de Salud Pública del Ministerio de Sanidad trabaja por generar evidencia científica que frene estas desigualdades. «En el Observatorio del Ministerio intentamos recopilar todo ese nuevo conocimiento que surge de la evidencia científica de diferentes estudios en cuanto a las desigualdades injustas y evitables que están condicionadas por la propia sociedad, que limitan la salud de manera diferente entre hombres y mujeres. Y recogiendo todo ese conocimiento lo que hacemos es gestionarlo y difundirlo y se lo devolvemos a la sociedad, donde diferenciamos a los equipos profesionales del ámbito sanitario, como diferentes perfiles profesionales, y a la sociedad en general para que tenga conocimiento de calidad acerca de cuál es su estado de salud y qué cosas están condicionando desde la sociedad. Todo esto se entrecruza con el género como puede ser a nivel socioeducativo, entorno económico, puestos de trabajo y su división sexual… Es un lugar de encuentro, de reflexión y de transmisión de conocimiento en un sentido y en otro», sigue López Rodríguez.
Nuevas masculinidades
Los hombres también han tenido protagonismo en este encuentro como una parte fundamental para luchar contra estas diferencias, así se han centrado en el trabajo con las nuevas masculinidades. «Desde 2014 llevamos trabajando las nuevas masculinidades, aquí el enfermero comunitario es el que puede hacer realmente el trabajo de campo. Hemos trabajado en diferentes ámbitos, en salud mental, la zona rural, jóvenes, escuelas de padres… Las nuevas masculinidades tienen que dar una ventana para toda esta política de género en la cual en un momento dado los hombres se quedan invisibilizados y en realidad son una parte activa para cambiar la sociedad con las políticas de genero», explica Carlos Piqueras Aguilera, enfermero de Atención Primaria y Comunitaria en el Servicio Madrileño de Salud y coordinador del proyecto «Hacia una Nueva Masculinidad».
Vulnerabilidad y salud comunitaria
El Consejo General Enfermería también estuvo presente en el congreso, gracias a la intervención de Silvia Domínguez, enfermera de su Instituto de Investigación Enfermera. A primera hora de la mañana, participó en la mesa de debate ‘Vulnerabilidad y salud comunitaria’, donde se abordó la vulnerabilidad desde diferentes ámbitos. Entre las diferentes ponentes, concluyeron en la necesidad de vincular formación y desarrollo profesional, la importancia del abordaje comunitario en vulnerabilidad a nivel intersectorial, la influencia de las políticas sanitarias, el empoderamiento de la población y el papel de la enfermera familiar y comunitaria en las desigualdades sociales en la salud.
Ya en horario de tarde, Domínguez participó en el bloque de Comunicaciones Orales ‘Intervenciones relacionadas con el abordaje de la desigualdad y la diversidad’ con la temática de mapeo de activos en salud en diferentes Comunidades Autónomas. Se explicaron diversas experiencias sobre formación de activos en asociaciones, entrevista motivacional en jóvenes con respecto al alcohol y evolución del registro de la prescripción social de activos.