REDACCIÓN.- Más de 150 representantes de la Organización Colegial de Enfermería, Sociedades Científicas y estudiantes -que representan a casi 300.000 enfermeras- se han reunido en Toledo para debatir, conocer y analizar las amenazas y retos a los que se enfrenta la profesión bajo el lema “Juntos, construyendo el futuro”. Todos los estamentos enfermeros han mostrado su indignación y preocupación ante la posible privatización de la Atención Primaria por el auge de un movimiento autodenominado como “Farmacia comunitaria” que, a pesar de no tener respaldo legal alguno, pretende hacer actuaciones de carácter asistencial con los pacientes crónicos tanto en la botica como a domicilio. En este sentido, cabe destacar la clara pretensión de facturar por todos estos servicios a las arcas públicas, a las mutualidades o al propio paciente, tal y como han reconocido públicamente en varias ocasiones. Se trata de actuaciones con pacientes vulnerables que requieren de las garantías de independencia clínica que sólo pueden asegurar las profesiones médica y enfermera. Más si cabe cuando el cuidado de los crónicos es uno de los ejes de la actividad enfermera.
Legislación nacional
Varias Comunidades Autónomas ya están legislando en este sentido, buscando un supuesto ahorro o mejoras que se basan en estudios de los propios farmacéuticos que no cuentan con rigor científico ni con independencia ni la credibilidad suficiente para validar una iniciativa que va a afectar de lleno al Sistema Nacional de Salud, pilar fundamental del Estado de Bienestar español. Los presidentes han recordado que la especialidad de “farmacia comunitaria” no existe ni tiene respaldo alguno por parte de la legislación española y han recalcado que los especialistas en “Medicina y Enfermería Familiar y Comunitaria” tienen que superar una oposición del Estado y posteriormente estar dos años -cuatro en el caso de los médicos- de residente en el Sistema Nacional de Salud, mientras que un farmacéutico que se hace llamar “comunitario” se autocalifica como tal sin control estatal ninguno.
Críticas
La Organización Colegial de Enfermería ha criticado duramente a los consejeros de Sanidad de las diferentes Comunidades Autónomas que están entrando en este juego porque están haciendo peligrar el sistema sanitario al dejar en manos de unos establecimientos privados y comerciales la atención que prestan médicos y enfermeros en el marco del sistema público, sobre todo en el ámbito de la Atención Primaria. Además de la carencia de respaldo jurídico y el riesgo para el propio paciente, los modelos de “farmacia comunitaria” que intentan imponer algunos gobiernos regionales suponen una clara invasión de las competencias profesionales.
Madrid, Comunidad Valenciana, País Vasco, Murcia, Castilla-La Mancha y Galicia están dando pasos importantes para sacar del sistema público y de los centros de salud, el seguimiento y control de pacientes crónicos y polimedicados, solicitando el acceso a la historia clínica del paciente y medidas como la revisión de los botiquines domésticos realizada, no olvidemos, por parte de personas que se ganan la vida con la dispensación y venta de medicamentos. La complejidad de muchos pacientes exige que sean otros profesionales sanitarios, enfermeros y médicos, quienes pueden garantizar la seguridad y salud de los pacientes sin más interés que su propia deontología profesional.
Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería, ha asegurado que “respetamos el importante rol de los farmacéuticos en el marco de la atención al ciudadano, pero esta profesión hermana debe ser consciente de sus límites a la hora de ejercer. Reconocemos que es legítimo tener nuevas aspiraciones profesionales. Sin embargo, ni entendemos ni toleramos que las administraciones públicas, como últimos responsables de la salud de los ciudadanos, entren en este juego y menos si eso implica arriesgar la salud de las personas, menoscabar la legislación vigente o frivolizar acerca de unas supuestas nuevas funciones que son competencia exclusiva y excluyente de las enfermeras y los médicos, sobre todo de las especialidades reconocidas por Ley de Enfermería y Medicina de Familia y Comunitaria”.
Inviabilidad de la normativa
Desde el punto de vista jurídico, José Ignacio Juárez Chicote, experto en Derecho Público, ha cuestionado incluso la viabilidad de las normativas que están aprobando algunas autonomías, puesto que, “además de que implica una invasión de ámbitos competenciales propios y exclusivos de la profesión enfermera, cualquier modificación regulatoria del modelo farmacéutico en su dimensión sustantiva sólo puede ser acometido por el Estado, titular de competencias exclusivas, así que estas leyes autonómicas podrían ser inconstitucionales”.
Esa supuesta atención comunitaria no puede ser la excusa para cercenar el sistema sanitario público y uno de sus pilares, como es la Atención Primaria. Por ello, en las Jornadas que están teniendo lugar en Toledo los representantes de la Organización Colegial de Enfermería de toda España (52 colegios provinciales, 17 Consejos Autonómicos y un Consejo General de ámbito nacional), de las Sociedades Científicas de Enfermería y de las Facultades y estudiantes de enfermería han consensuado medidas urgentes para evitar lo que puede suponer un golpe mortal al sistema sanitario. Los políticos deben conocer la trascendencia de las nuevas regulaciones en ciernes, sustentadas en argumentos falaces como supuestos ahorros para el sistema, reducción de las visitas a urgencias o mejor adherencia al tratamiento. Del mismo modo, los pacientes no deben recibir mensajes equívocos sobre hipotéticas virtudes de ser atendidos en establecimientos comerciales, alejados de los centros sanitarios y de los profesionales.
Los farmacéuticos tienen conocimientos de fisiología, patología y parámetros fisiológicos más que suficientes para desempeñar la labor que desempeñan y para más. ¿Medirle la presión arterial a alguien es extralimitarse?
Que me cuente un solo enfermero el mecanismo de acción de las más de 10 familias de antihipertensivos que dispensamos y hablaremos de presión arterial y de fisiopatología entonces, de científico a científico.
¿Falta de rigor científico? Cuéntame otra.
El gran avance de la medicina moderna es la farmacología clínica.
¿Trato con el paciente? El profesional de la salud mejor valorado y por algo será.
¿Fines lucrativos? Cuando la cosa se tuerce el farmacéutico se juega SU dinero, si sí, de su bolsillo, adelantando medicación si sanidad no paga, haciendo malabares para abastecer a sus pacientes. ¿Algún enfermero se juega su dinero? Ninguno.
El farmacéutico es el profesional sanitario que mas formación tiene en medicamentos , es el único experto en medicamentos.
Si en una farmacia veis a un auxiliar haciendo la guardia solo,lo único que debéis hacer es ir a un juzgado y denunciarlo porque esta prohibido.
En la ley de ordenacion de profesiones sanitarias dice bien claro que el farmacéutico colaborará en los procesos farmacoterapeuticos donde se encuentra el seguimiento del tratamiento del paciente , por ejemplo.
cada vez los boticarios estan sacando más los pies del tiesto. Hasta ahora hacian de minimédicos. Ahora quieren hacer de minienfermeros. Eso tambien lo hacen hasta los auxiliares de farmacia.
No veo donde hacen los farmacéuticos de minimedicos y mucho menos de minienfermeros,sinembargo ya que va de miniprofesiones los enfermeros deberian estar cuidando del paciente y saliendo de servicios como farmacia de hospital , laboratorios de analisis clinicos,etc donde que yo sepa no esta el paciente y hay profesionales mejor formados como medicos,biologos y los propios farmacéuticos.
Ademas de ilegal, falta de rigor científico y peligroso para la vida del Paciente, es dejarlo en las manos de los Auxiliares de Farmacia en la gran mayoría de los casos, porque son los que están mas tiempo en las mismas y montan solos los Servicios de Guardia.
Aqui todos somos complices, farmacia donde veas auxiliar solo,farmacia que debe ser denunciada.
Cada vez resulta más increible ver como los ciudadanos, quedamos a merced de unos «iluminados», gestores de lo público, que experimentan con nuestra salud y sin hacer nada al respecto.
Sobre todo, porque cada cuatro años, podemos mandarlos a su casa.
Deberíamos ser más exigentes con los que gestionan nuestro dinero y nuestro bienestar.
Al paso que vamos, los enfermos crónicos ya no los atenderán, en las Farmacias tampoco.
Crearan unas agencias de viajes, con peregrinaciones a Lourdes y Fátima……..y unos frasquitos de agua bendecida……
Dejemos de mirar para otro lado!!.
Artículo demagogo y avergozante. Cómo se puede hablar de privatización de la Sanidad pública desde la farmacia, sin conocimiento de causa, cuando la farmacia comunitaria, y no es un invento nuestro lo del término, lleva soportando carros y carretas en pros de la sostenibilidad del sistema. En ningún momento nos queremos “adueñar” del paciente. Este no les pertenece a nadie, solo tiene que estar en el centro de la atención sanitaria, y no hablemos de a quien les pertenece las competecias, solo trabajemos juntos, y no hagan demagogia si la sanidad debe ser pública o no…
Es la protesta desesperada de un colectivo que vive por y para sus intereses y en la mayoría de los casos dando la espalda al paciente.
Lamentable en lugar de sumar esfuerzos con otros colectivos en favor del paciente restan.
Ante esta actitud normal que los colectivos de pacientes se acerquen a los profesionales farmacéuticos.
Pues yo confío totalmente en mi farmacéutica. De hecho, es la que me explica cómo tomar la medicación y cómo usar mis inhaladores, puesto que en el hospital y centro de salud nunca tienen tiempo para estas cosas. Además, me pilla más cerca y voy a verla cuando quiero