D. RUIPÉREZ / A. ALMENDROS.- José Antonio López Guerrero, conocido como JAL, expone cómo ve la investigación en general y la enfermera en particular. Este microbiólogo, conocido por su faceta como divulgador científico, critica cómo tras la pandemia no se ha aprendido nada en cuanto a la necesidad de invertir en investigación y lejos de haber entrado en una fase postpandemia hemos vuelto a la de prepandemia. Además de ser un habitual en los medios de comunicación para hablar de ciencia, dirige el espacio de píldoras de divulgación científica en RTVE “El laboratorio de JAL”.

En los últimos años la producción de literatura científica en enfermería ha crecido exponencialmente y, de hecho, son avances que tienen una rápida traslación a la práctica clínica, a la ciencia de los cuidados. Sin embargo, nos encontramos con que las enfermeras para investigar tienen que renunciar a su tiempo libre, hacerlo fuera de su horario laboral, cosa que no pasa con otras disciplinas ¿Crees que habría que apostar también por la investigación en enfermería?

Desde luego, hay que apostar en investigación en general. Somos una de las diez o 15 potencias mundiales en economía. Curiosamente estamos también en ese rango en cuanto a publicaciones científicas en el mundo, pero luego no se corresponde con el aporte económico del Gobierno, de todos los gobiernos. Porque estamos a la cola de Europa con menos del 1,2% del PIB, cuando la media europea es de 2,5. Esto obliga a muchos científicos a abandonar España, donde somos muy bien recibidos, pero no tenemos suficiente potencia económica para hacer algo tan importante como es investigación. Lo dijo en tono, en tono irónico Unamuno: “Que inventen ellos”. Yo lo he lo he extrapolado a “que investiguen ellos”. Por desgracia, es una asignatura pendiente en España, también en el ámbito de la enfermería, donde hay mucho que investigar.

¿Pedirías horas de investigación para las enfermeras dentro de su jornada de trabajo?

Sí, no sé si dentro de las 40 horas actuales o dentro de las 37,5 horas, que parece una tontería, pero es media horita más al día para la conciliación familiar. Y desde luego se tiene que potenciar como parte fundamental del ejercicio de la enfermería. No como ese hobby que tiene un enfermero que quiere hacer cosas extras a su labor como profesional, como enfermero. Se tiene que potenciar dentro y compaginar dentro del ejercicio profesional de la enfermería.

Los profesionales sanitarios fueron reconocidos durante la pandemia con los aplausos, con un reconocimiento social y los científicos también, en la medida en que se pudieron crear vacunas en tiempo récord. Pero crees que ¿volvemos a estar en la casilla de salida?

Ya lo dijo Pasteur: “no existe la ciencia básica, la ciencia aplicada. Existe la ciencia y la aplicación de la ciencia”. Existen muchos proyectos donde dicen proyectos para una investigación aplicada, como si el resto de la investigación no tuviera una traslación luego a la sociedad. Yo llevo 30 años ya divulgando, así que cuando vino la pandemia es cierto que hubo un salto cuantitativo de mi presencia en los medios. Hubo un boom, todo se vino arriba. Lo bueno y lo malo. Se reconoció la labor de muchos científicos, se reconoció la labor también de los sanitarios, que yo era el primero que salía a aplaudir y seguía aplaudiendo mucho después de que se que se silenciará la canción aquella del dúo dinámico de Resistiré. Pero también destacó lo malo: Aparecieron muchos todólogos que sabían de todo, muchos bulos. No se discriminó entre la ciencia correcta y las fake news. Y todo eso pasó, pero por desgracia pasó también lo bueno, que es el mayor aporte económico y de investigación, hemos vuelto a la zona postpandémica. Se ha retirado el dinero de la investigación pública, se ha retirado el dinero en sanidad pública, se ha retirado el dinero en educación… Esto es un error que nos va a obligar otra vez a tropezar más pronto que tarde en la misma piedra.

Joan Massagué, el reputado investigador de Oncología, me dijo que los políticos nunca van a invertir en ciencia porque no da frutos a cuatro años vista. ¿Está de acuerdo?

Un país no investiga por ser rico, un país es rico porque investiga. Y esto, por desgracia, no lo saben nuestros políticos, sean del color que sean. Ninguno ha apostado. Decía Pedro Duque antes de que dejara su cargo como ministro que quería que España llegara en el año 2030 al 2% del PIB. Pues en el año 2023 el PIB medio europeo de investigación es 2,5, o sea que vamos muy por detrás de la locomotora de la investigación, que no correspondería por poder económico. Entonces, los políticos piensan en legislaturas y no piensan en desarrollo y en futuro, en temas tan estructurales como tendría que ser la investigación en todos los ámbitos. Y estamos condenado a seguir los éxitos de otros países. Como vimos durante la pandemia con las PCR, la parte más biotecnológica que nos obligó a improvisar con plásticos y demás en los hospitales…

Terapias génicas, células madre… ¿Cuál será el próximo avance que nos permitirá vivir 100 años con una salud brutal?

Yo creo que todo. La medicina personalizada va en esa dirección, acaba de salir ahora mismo una noticia que con terapia génica se puede incluso combatir la obesidad…, La biotecnología aplicada a la biomedicina es clave en el desarrollo de la idea del bienestar de nuestra especie.