DAVID RUIPÉREZ.- Aunque no podamos usar el plató de Canal Enfermero, la actualidad no se detiene y analizamos la gestión de la crisis del COVID-19 en Madrid, la labor de las enfermeras y sus equipos directivos y la vertiginosa restructuración de la sanidad para luchar contra la mayor amenaza sanitaria de la historia reciente. Lo hacemos de la mano de Lourdes Martínez, gerente de Cuidados de la Comunidad de Madrid, una mujer con una dilatada trayectoria en cargos de gestión y formación especializada en prestigiosas instituciones.

¿Pensaste que a lo largo de tu carrera como enfermera y como directiva te enfrentarías a la actual pandemia que atravesamos?

En absoluto, esto era impensable. A lo lago de mi trayectoria profesional en los inicios me enfrenté a la colza, el VIH o a la gripe A como enfermera asistencial en primera línea y más tarde, ya como directiva, atentados como el 11M o la crisis del ébola. Siempre pensé que todo ellos era un antes y un después en mi vida profesional y personal, pero eso ha cambiado por completo.

“Jamás pensé enfrentarme a esto en toda mi carrera”

La emergencia sanitaria os ha obligado a tomar decisiones ágiles, rápidas. No había manuales sobre cómo actuar ¿cómo se gestó la transformación de los hospitales y la reorganización de los recursos humanos?

Teníamos montada una mesa de COVID-19 en la Consejería de Sanidad, una mesa multidisciplinar, en la que Sara Gasco representaba a Colegio de Enfermeria de Madrid (CODEM), y en ella se ponían sobre la mesa las dificultades que se iban encontrando y solventando. Directivos y profesionales de los hospitales en esa reunión se sacaban las líneas de actuación día a día y esos equipos directivos de enfermería ponían todo en marcha al salir de esa mesa. Debemos poner en valor ese trabajo. Conforme aumentaban las llamadas al SUMMA, la actividad en Atención Primaria, los hospitales, las Urgencias… Todo iba creciendo y debíamos habilitar cualquier espacio que tuviéramos libre para acoger a esos pacientes.

“Se han cambiado cinco plantas de hospitalización en apenas unas horas. No se cómo ha sido posible”

Un cambio radical de la estructura y las funciones del hospital…

Una vuelta de 360 grados. El pasado 15 de marzo yo hice mis últimas visitas a hospitales y lo que hay ahora no tiene nada que ver con lo que había, las unidades de hospitalización, las urgencias, los espacios para UVIs. Se han llevado a cabo actuaciones urgentes para abrir unidades de hospitalización en el gimnasio, la biblioteca, las salas de espera… Son cambios brutales marcados por el día a día. No es fácil para los directivos por ejemplo cambiar cinco plantas con cien camas en cuestión de horas. Piensas, “Dios mío, cómo lo hemos hecho” y es mérito de los directivos de enfermería, supervisores de área y supervisores de unidad.

¿Ha sido muy traumático el cambio de rol o escenario de trabajo para los profesionales?

El incremento de la actividad fue importante. El SUMMA primero recibía las llamadas e iba a tomar las muestras. Se pasó rápidamente de 2.500 llamadas hasta 9.000, hubo que crear 10 unidades extra de toma de muestras. También hubo que acoplar a los profesionales de los Servicios de Urgencias de Atención Primaria (SUAP) para incorporarse a Ifema. Hablamos de trasladarse a una unidad de hospitalización. O pongamos el caso de los directivos de AP que se ven abocados a presentarse en Ifema, a llevar sus recursos humanos de AP (enfermeras, auxiliares, celadores…) cuando llevan mucho tiempo quizás fuera del ámbito hospitalario y aun así han dado “el do de pecho”. Las enfermeras no nos paramos a pensar que es lo que hay que hacer, sino cómo podemos solucionarlo. Hay que reconocer el gran trabajo de los equipos directivos y de todos los profesionales. Se merecen mucho más que un aplauso y todas esas enfermeras que han venido de otras regiones a trabajar a Madrid. También enfermeros y enfermeras del Consejo General de Enfermería y del Colegio de Madrid se pusieron en seguida a nuestra disposición.

“Ha habido piña y coordinación”

¿Ha habido una gran comunión entre las direcciones y las enfermeras?

Los directivos de las unidades enseguida han explicado los cambios, día a día, en un escenario tan cambiante y las enfermeras en seguida se han puesto a trabajar fueran cuales fueran las circunstancias. Ha habido “piña” y coordinación. Claro que ha habido que improvisar, pero es que hablamos de una situación tan excepcional que su precedente es la gripe de 1918.

¿Se ve ya la luz al final del túnel? ¿Cómo va a evolucionar la pandemia?

Creo que sí, pero el desescalamiento hay que hacerlo poco a poco. Las unidades COVID pasarán a no COVID y se irá recuperando la normalidad del hospital. Aunque esto es muy cambiante y de igual modo que bajan los ingresos podría haber algún repunte. Se están habilitando los bloques quirúrgicos, se abren pequeñas consultas y esperemos que pronto recuperemos