ÁNGEL M. GREGORIS.- La lesión medular es una interrupción de la conexión nerviosa a cualquier nivel de la médula espinal. Según a la altura a la que se produzca puede ocasionar tetraplejia, paraplejia o lesión de cola de caballo. Servir de soporte para estos pacientes y sus familiares, además de realizar técnicas específicas, es la función principal de la enfermería, que es una parte fundamental del equipo multidisciplinar encargado de cuidarlos.

Con el objetivo de actualizar los últimos avances para mejorar la supervivencia y calidad de vida en los pacientes con lesión medular, enfermeros, urólogos y rehabilitadores se han dado cita en Bilbao en las XXXIII Jornadas Nacional de la Sociedad Española de Paraplejia y el XXII Simposio de Enfermería Especializada en Lesión Medular.

“El equipo de enfermería es el que está en contacto más directo con el lesionado medular durante el ingreso hospitalario y parte fundamental de su labor es educar, informar y concienciar de los cuidados que va a requerir el lesionado a lo largo de su vida para prevenir complicaciones”, afirma Montserrat Cuadrado, enfermera del Hospital Cruces (Vizcaya) y copresidenta del comité organizador del simposio.

Dos de los grandes problemas a los que se enfrentan estos pacientes son la vejiga y el intestino neurógeno. Saber abordar estas complicaciones de la mejor manera posible es lo que busca el Manual de Casos Clínicos sobre la Vejiga Neurógena en el Lesionado Medular, realizado por profesionales del grupo Foro de Incontinencia de Coloplast y que contribuye a formar a los sanitarios para ayudar aún más a mejorar la calidad de vida del lesionado. “Todas las publicaciones relacionadas con el cuidado de estos pacientes nos resultan interesantes a los que tratamos con ellos a diario”, destaca Cuadrado, que considera recomendable una formación previa para aquellos que vayan a incorporarse a las unidades de tratamiento de la lesión medular.