MIRIAM OLIVAS.- La crisis del COVID-19 ha azotado al mundo entero y ha supuesto un reto para los líderes de enfermería. Las enfermeras han estado al frente de la contención de un virus que no daba tregua, algo que ha supuesto la reinvención de las formas de atención al paciente, la creación protocolos y el mantenimiento de la seguridad hospitalaria en una situación sin precedentes. En el desarrollo del Congreso Internacional de las enfermeras se ha puesto de manifiesto la labor de la enfermería europea desde el punto de vista de la toma de decisiones y la adaptación a los nuevos problemas.

Desde este prisma, ponentes de distintos puntos de Europa han expuesto su experiencia a nivel local. La falta de gestión enfermera ha sido la asignatura pendiente que ha querido poner en relieve Soledad Gallardo Bonet, directora regional del Hospital INCA (Islas Baleares): “Hace 30 años que soy enfermera y las cosas han cambiado de forma increíble, pero hay cosas que se resisten al cambio, de una forma muy parecida, no hay enfermeras gestoras de organizaciones. Esto debe cambiar. Además tenemos que ser capaces de dar respuesta a las necesidades y preferencias de las personas a las que cuidamos e incrementar la visibilidad enfermera. Durante la pandemia la enfermera ha sido el elemento clave y tiene que estar acompañada de apoyo social e institucional”.

En esta línea, Dame Anne Maarie Rafferty, enfermera e investigadora británica, también aboga por la necesidad de una acción coordinada que empuje a los gobiernos a impulsar la profesión enfermera: “El desafío mayor es la recuperación del COVID-19 y resetear la política y los sistemas de salud, así como regenerar la profesión. En toda Europa, las infraestructuras han sido muy débiles, tenemos que presionar a los gobiernos para que inviertan en ocupación y educación para mejorar el entorno laboral y necesitamos una estrategia coordinada, alinear los esfuerzos en toda Europa bajo el legado de la pandemia”.

Finlandia, el ejemplo

Un ejemplo de como desde las instituciones se pueden generar cambios muy positivos en la profesión, a la par que mejorar la salud de la sociedad, lo ha puesto de manifiesto Marjukka Vallimies-Patomäki, jefa de enfermería en el gobierno finlandés desde hace 26 años. En su ponencia ha contado las mejoras que se han conseguido desde esta posición de liderazgo. “En Finlandia las enfermeras realizan consultas en equipos interdisciplinares y el 80% de las enfermeras que pasan consulta en Atención Primaria tienen el derecho a recetar medicamentos. La importancia de enfermería aumentará debido al envejecimiento de la población, por eso es necesario integrar la política de enfermería en las Administraciones. El liderazgo gubernamental es fundamental para la consolidación, según mi propia experiencia”.

Enfermeras de práctica avanzada

Con una base de liderazgo se pueden desarrollar nuevas figuras enfermeras como las de práctica avanzada que son aquellas que cuentan con una amplia experiencia laboral y pueden proporcionar asistencia clínica.

“El liderazgo es el pilar de la práctica avanzada de las enfermeras que se puede llevar a cabo a través educación, regulación e investigación. Está en fase de desarrollo y gracias a ello se puede mejorar la calidad del cuidado de los pacientes”, explica Dr Daniela Lehwaldt, enfermera irlandesa y presidenta de la ICN NP / APN Network

Desafíos

En cuanto a los desafíos de la enfermería, mantener entornos laborales que sean gratificantes es un punto importante para que profesión continúe en alza. “Necesitamos  mantener entornos laborales positivos para retener a las profesionales en situaciones complicadas, tanto económicas como de otro tipo”, expone Christope Debout, jefe de programas de enfermería en el Institut de Formation Inter hospitalier Théodore Simon (IFITS).

Además, reconocer el valor añadido de las enfermeras y apostar por los jóvenes como la base del cambio es fundamental. “Es necesario preguntar a los estudiantes qué aprenden sobre liderazgo, la respuesta suele ser que nada. Hay que preparar a los estudiantes en este sentido a través de formación. El futuro de la enfermería está en sus manos”, cuenta Edel Marlen Taraldsen, Presidenta Asociación de Estudiantes de Enfermería de Noruega. Una afirmación que apoya Debout: “necesitamos líderes entre los jóvenes y necesitamos cambiar al imagen de la enfermería y centrarnos en la confianza que puede inspirar el papel de la enfermera”.