MARINA VIEIRA.- Representantes de las enfermeras de un total de 22 países se han reunido en la VII Conferencia Iberoamericana para dar a conocer la situación a la que se han enfrentado o se están enfrentando las profesionales de sus países frente al COVID-19. En una reunión online, las profesionales han tenido un espacio para compartir con otras naciones qué puntos se hubieran podido mejorar para que las condiciones profesionales de las sanitarias sean más positivas y todos han tenido dos puntos en común: con mejores equipos de protección no habría tantos profesionales sanitarios contagiados y si se contase con las enfermeras en la toma de decisiones los resultados a nivel de salud pública hubieran sido más positivos.
Así lo ha reclamado Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería de España quien ha dado a conocer entre sus colegas la dura situación de la enfermería española en los meses más duros de la pandemia. “Somos uno de los países del mundo con más sanitarios contagiados, en concreto 52.643, 87 han fallecido y cinco eran enfermeras. Esto se debe a que no hemos contado con equipos correctos de protección, día a día veíamos imágenes de compañeras protegiéndose con bolsas de basura por los hombros. Ha sido auténticamente vergonzoso”, ha reconocido con pesar el presidente de las enfermeras españolas. Testimonio que ha coincidido con los de sus homónimos en los distintos países de Iberoamérica que se encontraban representando a sus profesionales de en la cumbre internacional. “Ahora mismo nos encontramos en el pico de la pandemia. Contamos con 7.365 profesionales contagiados. Nuestras compañeras están ya agotadas tras 133 días de pandemia y por esta razón estamos reforzando líneas de apoyo en salud mental para que nuestras colegas puedan seguir trabajando. Estamos preocupadas porque se prevé desinstalar pronto el desconfinamiento y no creemos que el sistema sanitario esté preparado para ello”, ha visibilizado Mª Angélica Baeza, presidenta del Colegio de Enfermeras de Chile.
Países más afectados
La situación más dramática en cuanto a contagio y fallecimiento de enfermeras se ha registrado en Perú, El Salvador y Ecuador: 78, 22 y 14 enfermeras fallecidas respectivamente, un contexto que ha hecho que desde la Federación Ecuatoriana de Enfermeras se hayan movilizado para que todos los profesionales sanitarios luzcan un brazalete azul el 31 de julio. “Reclamamos no haber estado en la toma de decisiones, si hubiese sido así no tendríamos que estar lamentando tantas muertes a día de hoy”, ha explicado su presidenta Patricia Gavilánez en la cumbre internacional. “No basta que digan que es el Año Internacional de las Enfermeras, tienen que reconocer que valemos. Nos tienen que dar el espacio que corresponde. Es hora de debatir los temas grandes para fortalecer el posicionamiento de nuestras profesionales” ha reclamado Liliana La Rosa, presidenta del Colegio de Enfermeros de Perú.
Por su parte, Gilma Rico, presidenta de la Asociación Nacional de Enfermeras de Colombia, ha hecho ver a todos los asistentes que el número de profesionales sanitarios fallecidos a causa del COVID-19 en su país asciende a 32 y que esta cifra está en aumento por no contar con los equipos de protección adecuados. “Hoy casi la mitad del personal de la salud está contagiado. Se supone que en Colombia el pico va a ser en julio y para el 27 de agosto consideran que se va a tener la pandemia controlada. En Bogotá la alcaldesa está diciendo que se llame a la cuarentena total porque las UCIS están al 97% con solo pacientes COVID”, ha concretado Rico. En Uruguay, el 16% del total de los infectados han sido sanitarios -161 de los cuales 97 son enfermeras- y en Nicaragua se ha tenido que lamentar la muerte de cinco enfermeras a causa del COVID-19.
Desde la Sociedad Cubana de Enfermería, su presidenta, Idalmis Infante, ha explicado que en la isla caribeña se han contado hasta la fecha 205 sanitarios infectados, de los cuales 100 son enfermeras. En República Dominicana, desde la Asociación de Enfermeras Graduadas, se ha dado a conocer que se han tenido que lamentar cinco enfermeras fallecidas y que hay 300 infectadas por el virus.
Registro irreal
Otros países han declarado contar con registros no reales de los casos que se están teniendo, así se ha reclamado por parte del representante de la Asociación Guatelmateca de Enfermeras Profesionales o la presidenta de la Federación de Colegios Profesionales de la Enfermería de la República Bolivariana de Venezuela, quien explicaba que el registro oficial estima 35 sanitarios contagiados pero por sistema de encuestas de su federación se han contabilizado 14 médicos fallecidos y tres enfermeras, unos datos que la propia presidenta de las enfermeras venezolanas considera discordantes. En la misma línea ha ido el testimonio de las representantes de las enfermeras mexicanas, tanto de la Federación Mexicana de Colegios de Enfermería, Mª Teresa Maldonado, como Perla Idolina Barragán, del Colegio Nacional de Enfermeras, A.C. de México quienes han explicado que en su país existe “un gran subregistro de los compañeros contagiados” y han destacado momentos de gran tensión por las agresiones y secuestros sufridos por las compañeras enfermeras.
Datos más positivos
La situación más alentadora la han presentado los representantes de países como Paraguay o Puerto Rico -por primera vez con representación en esta cumbre-. En Paraguay, tal y como ha introducido Mirna Gallardo, sólo se han contagiado 60 sanitarios y no se ha lamentado ninguna muerte por COVID-19 entre los trabajadores de la salud. En cuanto a la situación de Puerto Rico, gracias a una cuarentena temprana, sólo se tiene que lamentar la muerte de una compañera y se han registrado 53 casos de contagios.
Además, la cumbre los altos representantes de las enfermeras ha servido para visibilizar las reivindicaciones profesionales propias de su territorio. “El personal de mi país no se siente seguro, no hay escucha directa”, ha reclamado Ana Reyes, presidenta de la Asociación Nacional de Enfermeras de Panamá. Por su parte, Sonia Gómez, presidenta de la Federación Argentina de Enfermería ha expuesto los distintos proyectos que desde su asociación se están llevando a cabo “estamos desarrollando webinars para capacitar al personal y estudiantes de enfermería. También estamos creando nuevos espacios de comunicación para informar a los socios y nos encontramos inmersos en un proyecto de investigación de teleenfermería”, exponía la presidenta de las enfermeras argentinas. Asimismo, la enfermería de Brasil representada en este encuentro por Conselho Federal de Enfermagem-COFEN de Brasil, ha concretado que se han formalizado más de 50 mil denuncias de falta de bioseguridad y desprotección por parte del Gobierno con la situación grave de contaminación, padecimiento y muerte de los profesionales sanitarios en su territorio.
Convenios de colaboración
En el seno de la Conferencia Iberoamericana se ha propuesta un nuevo convenio de colaboración entre el Consejo General de Enfermería y los países participantes. Un acuerdo que permitirá desarrollar acciones conjuntas en materia de formación, cooperación, buenas prácticas enfermeras o investigación. Con el objetivo de fortalecer mutuamente las organizaciones profesionales y potenciar el liderazgo de las instituciones firmantes como representantes de las enfermeras en sus respectivos países.
Instituto de formación enfermera
Además, en el seno de la conferencia internacional, desde el Consejo General de Enfermería se ha presentado el Instituto Superior de Formación Sanitaria (ISFOS). Pilar Fernández, vicepresidenta I del Consejo General de Enfermería y directora de ISFOS ha dado a conocer a todos los asistentes esta entidad formativa de la Organización Colegial de Enfermería de España y han puesto a disposición de las asociaciones internacionales toda su actividad formativa. Asimismo, el vicesecretario general, José Luis Cobos, ha presentado las líneas generales en las que trabaja el Instituto Español de Investigación Enfermera (IE).
VII Conferencia Iberoamericana
La Conferencia Iberoamericana es un encuentro internacional que reúne a representantes de distintos países de Iberoamérica para dar a conocer la situación a la que se enfrentan cada una de las enfermeras participantes. En ella se establecen estrategias de forma conjunta que permitan potenciar el liderazgo de las instituciones que representan a las enfermeras en cada país, así como, llevar a cabo acciones que fomenten el desarrollo profesional de las enfermeras con el fin de contribuir a la mejora de la atención sanitaria y la seguridad de los pacientes.
En esta ocasión, ha contado con la participación del Consejo General de Enfermería, la Federación Argentina de Enfermería, el Conselho Federal de Enfermagem-COFEN de Brasil, el Colegio de Enfermeras de Bolivia, el Colegio de Enfermeras de Chile, la Asociación Nacional de Enfermeras de Colombia, el Colegio de Enfermeras de Costa Rica, la Sociedad Cubana de Enfermería, la Asociación Dominicana de Enfermeras Graduadas, la Federación Ecuatoriana de Enfermeras, la Asociación Nacional de Enfermeras de El Salvador, la Asociación Guatelmalteca de Enfermeras Profesionales, el Colegio de Profesionales de Enfermería de Honduras, el Colegio Nacional de Enfermeras de México, la Asociación de Enfermeros Nicaragüenses, la Asociación Nacional de Enfermeras de Panamá, la Asociación Paraguaya de Enfermeras, el Colegio de Enfermeras de Perú, el Colegio de Profesionales de la Enfermería de Puerto Rico, el Colegio de Enfermeras de Uruguay, Federación de Colegios de Profesionales de la Enfermería de la República Bolivariana de Venezuela y la Federación Panamericana de Profesionales de Enfermería.