REDACCIÓN.- Expertos de enfermería instan a los gobiernos a reconocer la importancia capital de que las enfermeras participen en la toma de decisiones sanitarias y reafirman el valor de la enfermería en la prestación de atención de salud de calidad. Estas peticiones se han llevado a cabo en el marco de la celebración del Foro Internacional del Consejo Internacional de Enfermeras (CIE) sobre Recursos Humanos, celebrado en Helsinki (Finlandia).
Durante tres días, enfermeros de Canadá, Dinamarca, Finlandia, Irlanda, Japón, Nueva Zelanda, Suecia y Estados Unidos han debatido sobre la situación de los recursos humanos y las condiciones laborales en la profesión de enfermería. Entre los temas de análisis se encontraban el acoso, niveles seguros de dotación de personal, retención de enfermeras, estrategias y habilidades de lobby y se ha realizado una sesión de formación sobre la negociación de acuerdos.
Lesley Bell, enfermera consultora del CIE y encargada de dirigir el Foro, ha comentado que “los participantes han hablado apasionadamente sobre el papel de las enfermeras en la prestación de Atención Primaria centrada en las personas, reconociendo que no hay atención de salud sin recursos humanos y no hay recursos humanos sin enfermeras y matronas bien formadas, ejerciendo todo su ámbito profesional en entornos positivos para la práctica.”
Por su parte, Christiane Wiskow, especialista de los servicios de sanidad de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), ha presentado la Convención sobre Personal de Enfermería de la OIT que reconoce el papel vital que desempeña este tipo de personal y establece estándares laborales mínimos diseñados específicamente para resaltar las condiciones especiales en las que se prestan servicios de enfermería.
“En las próximas décadas, cada vez habrá más competencia, tanto dentro de los países como a nivel mundial, para conseguir trabajadores sanitarios cualificados. Las malas condiciones laborales, los sueldos bajos y las limitaciones en las oportunidades de carrera son factores significativos que contribuyen a incrementar la migración de los trabajadores de la salud, así como a la salida temprana de las enfermeras del sector sanitario,” según Wiskow.
Desigual distribución
La desigual distribución de los trabajadores sanitarios entre áreas rurales y urbanas es un problema tanto a nivel mundial como dentro de los países, puesto que provoca desigualdades en el acceso a la atención de salud, ha señalado Christiane Wiskow. Es importante que los países trabajen en aras de la sostenibilidad de la fuerza laboral sanitaria e inviertan suficiente en personal de salud.
“Esto no sólo significa que invirtamos en formar a más trabajadores sanitarios”, ha añadido Wiskow. “También necesitamos oportunidades de empleo, buenas condiciones laborales y sueldos que permitan vivir.”
“Los efectos del deterioro de la economía son ya evidentes en todo el mundo en la reducción de los criterios de elegibilidad para las enfermeras, los recortes salariales y las negociaciones sobre la calidad de los cuidados y la seguridad del paciente,” según ha afirmado Merja Merasto, presidenta de la Asociación de enfermeras de Finlandia. Asimismo, ha resaltado que la situación es preocupante tanto desde la perspectiva de las enfermeras como desde la de los pacientes.Los recortes no mejorarán la eficacia de la atención de salud o el atractivo del sector. Todo lo contrario, es ahora cuando habría que probar los nuevos métodos, como por ejemplo nuevas modalidades de distribución del trabajo, más funciones para las enfermeras y soluciones para facilitar la conciliación entre la vida laboral y la vida familiar.
En la actualidad, el gobierno de Finlandia está intentando restringir los derechos de las enfermeras registradas, a la libre negociación colectiva. Los líderes de enfermería asistentes manifestaron su solidaridad con la Asociación de enfermeras de Finlandia y con el Tehy, Sindicato de profesionales socio sanitarios de Finlandia, a la par que instaron al gobierno de Finlandia a proteger y potenciar los derechos de las enfermeras.