ÁNGEL M. GREGORIS.- “La prioridad en estas semanas ha sido atender a los pacientes COVID-19 y es cierto que toda la atención a pacientes crónicos ha sido relegada y ellos han sido muy desatendidos. Ahora con la desescalada es el momento de hacer una reflexión y replantearnos como hacer frente a esta situación y cuáles son las mejoras que hay que llevar a cabo”. Así lo ha puesto de manifiesto el secretario general del Consejo General de Enfermería, Diego Ayuso, en el encuentro online “La atención integral al paciente crónico en la era post COVID-19: el reto empieza ahora”, organizado por la plataforma Cronicidad: Horizonte 2025, en el que se ha analizado la situación que han vivido estos pacientes durante la pandemia y cuáles son las oportunidades para mejorar su atención a partir de ahora. El objetivo de la plataforma, constituida por pacientes y representantes de todas las profesiones sanitarias, es situar a la cronicidad entre los temas prioritarios de la agenda política y parlamentaria para elevar la problemática a un asunto de Estado, contribuyendo a aumentar su visibilidad pública.
Durante su intervención, Ayuso ha puesto de manifiesto algunas de las deficiencias que, desde la enfermería, han sufrido los pacientes crónicos. En primer lugar, el secretario general del CGE ha criticado que no haya existido una prevención clara con ellos, realizándoles test para detectar pacientes asintomáticos entre uno de los grupos más vulnerables.
Asimismo, ha puntualizado que otra de las debilidades ha sido la atención en el ámbito residencial, los que más han sufrido la mortalidad durante la crisis. “No estamos dando a las enfermeras especialistas en Geriatría la importancia que tienen y esto se ha visto en que ha habido muchísimas comunidades con unas cifras altísimas de pérdidas en residencias”, ha comentado. En esta misma línea, ha hablado también de las especialistas en Familiar y Comunitaria, una categoría que no se ha implantado a día de hoy en todo el país, así como la de Cuidados Críticos, que ni siquiera está creada y “su carencia ha contribuido a poner en jaque a las UCIs en todos los hospitales porque son una figura clave para que sacar adelante a estos pacientes críticos”.
Con todas estas premisas, Ayuso ha recalcado que serían necesarias 15.000 enfermeras más en Atención Primaria para hacer las labores adecuadas durante esta desescalada y también posteriormente. “Tenemos unas ratios bajísimas comparadas con el resto de la Unión Europea y es evidente que esto nos ha pasado factura a la hora de dar la atención que merecían estos pacientes crónicos. Además, se está haciendo una muy mala gestión de las enfermeras especialistas en Familiar y Comunitaria”, ha recalcado.
Por último, ha querido criticar y reseñar la importancia de que las enfermeras participen de forma activa en las políticas de salud “porque podemos aportar un gran valor”. “No se nos ha tenido en cuenta para las comisiones, grupos de decisiones y eso no podemos tolerarlo desde la Organización Colegial”, ha señalado.