REDACCIÓN.- La actual presidenta del Colegio de Enfermería de Murcia, Amelia Corominas, el secretario de la institución, Enrique Mirabet, y otros siete antiguos miembros de la junta de Gobierno del colegio se sentaron ayer en el banquillo de los acusados, tal y como informa el periódico La Verdad. En la sesión de ayer la fiscal solicitó una pena de ocho meses de prisión por usurpación de funciones, con inhabilitación para el sufragio pasivo durante ese tiempo. Así, la fiscal pide ocho meses de cárcel a Amelia Corominas, presidenta del Colegio de Enfermería de Murcia, por usurpación de funciones.
Antecedentes
Los hechos se remontan a las elecciones que el Colegio de Enfermería de Murcia convocó en 2016, siendo presidenta Corominas. Estos comicios se convocaron en plena Semana Santa y Fiestas de la Primavera Murciana. De tal forma que los ocho días que marcan los estatutos para la presentación de candidaturas se redujeron a tres días hábiles y en los que dos de esos tres días el colegio abrió tan sólo en horario de mañana. El Consejo General de Enfermería, a petición de diversos colegiados de la Región, anuló esta convocatoria por la vulneración de los derechos de información y participación de los colegiados al obstaculizar la presentación de candidaturas alternativas.
Sin embargo, ante la negativa de Corominas y su equipo de cumplir la resolución, los hechos acabaron en los tribunales. Aquí, dos sentencias de Tribunal Superior de Justicia de Madrid y otra del Tribunal Supremo ratificaron la anulación de las elecciones realizada por el Consejo General de Enfermería y el nombramiento una Junta de Edad para regir la actividad colegial hasta la convocatoria de nuevos comicios.
Sin embargo, durante 2017 y 2018 Corominas y su equipo se negaron a asumir la resolución del CGE y siguieron con la gestión colegial: intentaron convocar nuevas elecciones, asambleas de colegiados, presentarse en actos oficiales y ante los medios como representantes de la enfermería murciana… Ante el incumplimiento de las sentencias judiciales, el propio Tribunal Superior de Justicia de Madrid trasladó a la fiscalía de Murcia las actuaciones y fue el Ministerio Fiscal el que inició los trámites que han llevado al juicio celebrado en el día de ayer acusados de presuntos delitos de desobediencia y usurpación de funciones.
En enero de 2023, tras el proceso electoral convocado por la Junta de Edad nombrada por el CGE, Amelia Corominas y su equipo volvieron a resultar elegidos para representar a las enfermeras murcianas, ahora sí, cumpliendo con la legalidad.
El juicio
Al frente de la institución, además de Corominas, repetía el secretario de la institución, Enrique Mirabet. Ambos son los que se sentaron ayer en el banquillo de los acusados. Sin embargo, otros siete antiguos miembros de la Junta de Gobierno, según publica La Verdad, llegaron a un acuerdo de conformidad por el que aceptaron una condena de seis meses de prisión. Según indica el periódico murciano, con este pacto han pretendido evitar una posible inhabilitación para el ejercicio de cargo o empleo público para no perder su condición de funcionarios.
Sin embargo, tanto Corominas como Mirabet rechazaron el acuerdo. Para ellos, la fiscalía finalmente solicita ocho meses de prisión por usurpación de funciones, con inhabilitación durante ese periodo únicamente para el sufragio pasivo, lo que de confirmarse en la sentencia no implicaría tener que dejar su actual cargo. Ahora depende del juez estimar o no la petición de la fiscal. El caso quedó visto para sentencia.