ALICIA ALMENDROS / DIEGO AYUSO.- Las enfermeras cada vez tienen más protagonismo en el Sistema Nacional de Salud (SNS). De ello han debatido en el Simposio “Ampliando competencias enfermeras ante los nuevos retos”, que ha tenido lugar en el marco del Congreso Internacional de Enfermeras de Singapur. “Cualquier transformación del SNS pasa por las enfermeras. Es una profesión que ha demostrado su efectividad para la sostenibilidad del sistema”, ha afirmado Alfredo Escaja, moderador del simposio y presidente del Consejo de Colegio de Enfermería de Castilla y León.
Aunar esfuerzos
Inés Casado, vicedecana de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de León y vicepresidenta del Colegio de Enfermería de León, hizo una reflexión acerca de la relevancia que tiene la evidencia científica para el desarrollo de las nuevas competencias en enfermería. “He hecho una introducción histórica en la que muestro la necesidad de la investigación para el desarrollo y avance de la profesión. Los pasos que en los últimos años se han ido dando en nuestro país han sido clave para favorecer el desarrollo profesional que tenemos en la actualidad”, ha resaltado Casado. Y es que, para esta enfermera, investigar no es sólo una necesidad, es una obligación recogida en la legislación y “en nuestro código ético deontológico”, ha reseñado. Pero el camino que tiene en su día a día las enfermeras tiene dificultades. “Existen barreras a la hora de llevar a cabo la investigación, a la hora de difundir los resultados… pero sobre todo existe una brecha importante entre lo que son los resultados de investigación y la práctica clínica. Ahí es donde deberíamos hacer un esfuerzo mayor para aunar la parte académica e investigadora con la realidad clínica de los profesionales en su día a día”, ha argumentado Casado.
Durante el simposio, se han propuesto varias iniciativas que ayuden a la profesión avanzar. “Hemos visto un caso clínico importante donde observamos que un enfermero puede liderar un trabajo de investigación multidisciplinar con otros profesionales. Este tipo de iniciativas son un gran paso para que la enfermería deje de ser una profesión auxiliar y empiece a ser líder”, ha apostillado el presidente del Consejo de Colegio de Enfermería de Castilla y León.
Desarrollo profesional
Juan José Fernández, representante del Colegio de Enfermería de Valladolid, ha sido otro de los ponentes. En esta ocasión, Fernández ha hablado de gestión enfermera. “Debemos ser capaces de gestionar todas las demandas de salud que tiene nuestra población actuando sobre ellas y consiguiendo actuaciones finalistas en las que nosotros dentro de nuestra propia competencia seamos capaces de abordar y gestionar todas las situaciones”, ha explicado.
El tercer ponente, Francisco Martín, enfermero de emergencias de UVI móvil de Valladolid ha planteado la necesidad de la detección precoz de pacientes de alto riesgo en el ámbito específico de las emergencias prehospitalarias. “Para ello, debemos servirnos de dos tipos de herramientas: las escalas de edad temprana que da la ponderación de las constantes vitales del paciente dándole unos valores estadísticos, y los valores de ácido láctico. Juntando los dos valores obtenemos una graduación de riesgo que nos permite de seis a ocho horas de un efecto adverso grave detectar que pacientes pueden llegar a ser potencialmente graves y de esta forma tomar decisiones en el ámbito de sus competencias, pero sobre todo detectar que existe esa situación”, ha argumentado Martín. Y es que en el ámbito específico de la emergencia prehospitalaria, “el enfermero o enfermera tiene el papel fundamental de poder detectar de forma rápida que estamos ante una enfermedad tipo dependiente y para ello, estas escalas o marcadores pronósticos son fundamentales; sobre todo porque permite que el profesional disponer de todos los datos y tomar la decisión más adecuada”, ha finalizado