EUROPA PRESS.- La Organización Mundial de la Salud y la Confederación Internacional de Matronas y la White Ribbon Alliance (WRA) ha publicado un comunicado conjunto en el que piden que «se ponga fin a la discriminación, el acoso y la falta de respeto» a las matronas, y, asimismo, se mejoren sus condiciones de trabajo para que puedan proporcionar una atención de calidad a las mujeres y los recién nacidos.
«Es hora de reconocer el papel fundamental que desempeñan las parteras en mantener vivas a las madres y los recién nacidos», afirma el director del Departamento de Salud de la Madre, el Recién Nacido, el Niño y el Adolescente de la OMS, el doctor Anthony Costello, quien ha lamentado que «con demasiada frecuencia» se les haya negado un asiento «en la mesa donde se toman de decisiones».
Este comunicado se produce tras conocer los datos de la primera encuesta mundial sobre la situación del personal de obstetricia, puesta en marcha por los tres organismo, que presenta los resultados de una encuesta ‘on line’ a 2.400 parteras de 93 países.
Dicha encuesta, financiada por la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID), revela que demasiado a menudo las parteras informan de sus esfuerzos por una mejor atención, sin embargo se ven limitadas por las relaciones desiguales de poder dentro del sistema de salud. Muchas parteras también se enfrentan al aislamiento cultural, alojamientos inseguros y los bajos salarios.
«Las parteras deben ser respetados, valorados y compensados como iguales a otros profesionales», ha añadido Frances Ganges, el presidente ejecutivo de ICM. La encuesta muestra que, aunque, la mayoría se sienten tratadas con respeto, muchas parteras reportaron acoso en el trabajo, falta de seguridad y miedo a la violencia.
Las tres instituciones recuerdan que, cada año, más de 300.000 mujeres mueren al dar a luz y, al menos, 2,7 millones de recién nacidos mueren durante los primeros 28 días de vida, muchos por causas evitables. Para evitar esta situación, es vital el papel que juegan las parteras, que dan una atención especializada, eficiente y compasiva durante todo el embarazo y el parto, aunque esto curre «sólo cuando es de calidad y proporcionada por parteras educadas y reguladas a las normas internacionales».
«Las matronas son esenciales para proporcionar calidad, materna respetuosa y cuidado del recién nacido. Son capaces de prevenir y manejar muchas de las complicaciones del embarazo y el parto y desempeñar un papel crucial en la que termina infantil evitable y muertes maternas», ha explicado el doctor Ariel Pablos-Méndez, Administrador Auxiliar para la Salud Global y el niño y el coordinador de Supervivencia materna de la USAID, quien «está comprometida a apoyar y capacitar a su importante papel en la vanguardia de los sistemas de salud».
Por su parte, la directora ejecutiva de White Ribbon Alliance, Betsy McCallon, ha sido contundente al afirmar que para alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible, «hay que valorar y apoyar a las parteras», porque «son directamente responsables de proporcionar salud reproductiva, materna y los servicios de salud del recién nacido, sin embargo, son en gran medida ausente o ignorado desde el diseño de políticas y programas en todos los niveles».
MÁS APOYO Y MEJOR REGULACIÓN
Las organizaciones ponen de relieve la necesidad de proporcionar parteras con apoyo profesional, incluida la mejora de las condiciones de trabajo; una educación más fuerte y entornos regulatorios; y más fuerte incidencia en torno a la obstetricia.
«Al igual que todos estamos comprometidos con la atención de más alta calidad para todas las mujeres, recién nacidos y sus familias, por lo que debemos estar unidos en nuestro fervor para asegurar que el personal de partería es apoyado por una educación de calidad, la regulación y las condiciones de trabajo seguras», ha añadido Ganges.
Una quinta parte de las parteras que respondieron a la encuesta afirma que depende de otra fuente de ingresos para sobrevivir, asimismo se sienten en tensión antes la presión y el cansancio que experimentan. Muchos combinan los papeles de trabajo, la maternidad y el cuidado de otros en sus comunidades.
Las parteras informaron que largas horas de trabajo y falta de respeto en el desarrollo de sus labores, lo que influye negativamente en la autoestima de las matronas y su capacidad para proporcionar atención de calidad a las madres y los bebés en todo el mundo.
Desde las organizaciones recuerdan que aún en muchos países las matronas carecen de una educación adecuada, y no cuentan con el apoyo regulatorio y legal necesario. Por eso, añaden, sería importante evaluar nuestras estrategias que se basen un mayor apoyo a estas profesionales, así como en fortalecer la educación y reglamentación que rodea a la obstetricia.
«Para mejorar las condiciones de trabajo de las parteras y calidad de la atención para las mujeres y los recién nacidos, profesionales de partería necesitan salarios que reflejan adecuadamente el nivel de sus habilidades y responsabilidades, seguros de salud y de seguridad social, las redes de apoyo profesional, un buen entorno de vida, y servicios de asesoramiento», advierten en el comunicado.
Con base en los resultados de la encuesta, la OMS, ICM, MEF, USAID, UNFPA y otros asociados están desarrollando la ‘Estrategia Global de Promoción de la Obstetricia’, destinada a hacer frente a las barreras obstétricos se enfrentan el personal con el fin de mejorar la calidad de la atención.
La estrategia instará a los responsables de las tomas de decisiones a evaluar la evidencia sobre el impacto positivo de los cuidados de partería de calidad; se alentará a los políticos a recurrir a la experiencia de las parteras cuando se toman decisiones de política y estrategias que afectan a la atención materna y neonatal.