GEMA ROMERO.- Las enfermeras catalanas ya pueden prescribir en su práctica diaria dentro del sistema de receta electrónica. Para ello primero deben obtener la acreditación correspondiente para la prescripción a través del Canal Empresa de la Generalitat. Una vez acreditadas deberán notificarlo a su empresa o proveedor para que solicite a los colegios provinciales de Enfermería el certificado digital – en forma de tarjeta – que permite la identificación de la enfermera ante el Sistema Integrado de Receta Electrónica (SIRE).
Tal y como explica Miquel Àngel Calderó, secretario del Consejo Catalán de Enfermería, “todo este proceso de implantación, que nos va a llevar unos meses, empieza con la acreditación de las enfermeras. Una vez que disponen del certificado de acreditación emitido por el Departamento de Salud, deben comunicar a su empresa o proveedor del CatSalud que se encuentran en disposición de prescribir, para que este proveedor se dirija a los colegios provinciales de Enfermería, que son los que emiten los certificados digitales que permiten la identificación de la enfermera, mediante una tarjeta, ante los sistemas de salud de emisión de recetas electrónicas”.
Pruebas
De momento, y durante este mes de febrero, el sistema está en pruebas con 114 enfermeras de 38 equipos de Atención Primaria. Posteriormente, el proceso de certificación se irá desplegando en todo el territorio catalán. Así, “las enfermeras podremos prescribir unos 5.00 productos farmacéuticos de forma autónoma, unos 1000 medicamentos y unos 4000 productos sanitarios”, detalla Marta Pifarré, enfermera pediátrica en el consultorio de Alpicat (Lleida). Pifarré es una de las 25.709 enfermeras, de las aproximadamente 52.000 enfermeras en activo que hay en Cataluña, que ya cuenta la acreditación para prescribir.
Además del reconocimiento profesional que representa esta meta, para el Consejo Catalán de Enfermería “es importante remarcar que supondrá normalizar una situación que forma parte de las actividades enfermeras y mejorará la atención de la ciudadanía, mediante la desburocratización del sistema de salud y la disminución de la duplicidad de visitas, además de dar visibilidad a las prescripciones que realizan las enfermeras, haciendo el sistema más eficiente”.
Precisamente, el despliegue se ha iniciado en Atención Primaria, dado que las enfermeras que trabajan en este ámbito son las que más prescripciones autónomas han hecho y utilizan desde hace tiempo los módulos de prescripción de la estación clínica de trabajo.
Este proceso complejo ha requerido de la cooperación de la Gerencia del Medicamento del CatSalut, los colegios profesionales que configuran el Consejo Catalán de Enfermería y de las entidades proveedoras del SISCAT.
Adaptación al sistema
En agosto de 2019, se publicó el Decreto 180/2019, que regulaba el procedimiento de acreditación de las enfermeras y enfermeros para la indicación, el uso y la autorización de la dispensación de medicamentos y productos sanitarios de uso humano.
Aparte de la acreditación, y para culminar el proceso, se ha tenido que elegir y contratar a la entidad certificadora y adaptar los certificados digitales al Sistema Integrado de Receta Electrónica (SIRE).
Actualmente, se están creando puntos de verificación en los centros del SISCAT donde las enfermeras prestan sus servicios. Estos puntos de verificación deben facilitar las gestiones de la emisión de tarjetas, que harán posible la firma electrónica.
Durante estos últimos meses, el consejo catalán ha trabajado estrechamente con la Gerencia del Medicamento del CatSalut para adaptar la veintena de softwares y estaciones clínicas de trabajo que utilizan el centenar de proveedores del SISCAT para hacer posible que las prescripciones de las enfermeras se integren al SIRE, que es el sistema que regula la receta electrónica y la tramitación telemática para que el medicamento o el producto sanitario puedan ser dispensados en las oficinas de farmacia.