El 55% de las enfermeras de la sanidad privada defiende y recomendaría su lugar de trabajo. Así lo refleja el informe ‘Experiencia del profesional sanitario en la sanidad privada 2025’, elaborado por la Fundación IDIS en colaboración con la agencia ‘Lukkap’, y en el que analizan la satisfacción de las enfermeras españolas que trabajan en sanidad privada en diferentes ámbitos laborales.

De ese 55% de enfermeras que recomendarían a sus compañeras su centro de trabajo para desarrollarse laboralmente, el 30% lo puntúa con una nota de entre 7 y 8, mientras que el 25% lo hace con un 9 o 10. Pero, más allá del dato en positivo, desde el sector tienen claro que todavía «queda camino por recorrer» y es importante volcar esfuerzos en el desarrollo profesional de las enfermeras en el sector privado. Juan Abarca, presidente de la Fundación IDIS, ha destacado que la existencia de este informe “es síntoma de que están preocupados y que buscan mejorar”. Además, ha hecho hincapié en la importancia de “generar buenas condiciones” no solo para retener a las enfermeras en el sistema privado, sino para atraer nuevo talento.

“Los datos que se presentan en este estudio servirán para mejorar aún más este sector de la sanidad privada; permitirán acometer las reformas necesarias para fortalecer el capital humano de la sanidad privada”, ha puesto de manifiesto Florentino Pérez Raya, presidente del Consejo General de Enfermería (CGE), durante la presentación del informe. “Es precio siempre un análisis interno profundo y detallado y la medición de procesos para poder optimizar los recursos humanos y materiales en beneficio de los pacientes y la sociedad en general”, ha añadido.

Factores con mayor impacto

El informe ha hecho una imagen completa de los factores que más influyen en el bienestar y experiencia de las enfermeras que desarrollar su actividad laboral en el ámbito privado. La recopilación refleja que los cinco elementos que tienen más impacto en la satisfacción de las enfermeras respecto a la sanidad privada son los siguientes: el interés que prestan sus responsables en sus momentos vitales importantes, recibir ‘feedback’ de sus responsables, que se acepten sus ideas y sugerencias, poder recibir formación clínica y que su trabajo sea reconocido.

El estudio se ha centrado en el análisis de los factores más influyentes para las enfermeras en términos de su satisfacción con el trabajo en la sanidad privada. Por ejemplo, el 71% de las encuestadas destacó que, en los primeros días de su incorporación, se les dio oportunidad de conocer su centro u hospital a fondo. El 86% destaca la facilidad para acceder a la información de sus pacientes por parte de los compañeros sanitarios, así como el 82% pone en relieve que dispone de herramientas, como formaciones, que suponen una ayuda a la hora de gestionar los equipos y formar parte de ellos.

El 80% comenta la importancia que tiene que sus compañeros les presten apoyo y ayuda en un momento vital importante, así como el 70% menciona que en momentos concretos les han dado oportunidad de tener un horario más flexible.  

Estabilidad laboral

Entre los aspectos clave que las enfermeras consideran que fortalecen su experiencia el informe menciona la estabilidad laboral que sienten las enfermeras en el centro en el que trabajan, el entorno y el día a día con sus compañeros, y que cuentan con gran autonomía en su trabajo tanto internamente como de cara al trato con los pacientes.

En relación a la satisfacción general que tienen las enfermeras como profesionales de la sanidad privada, estas le ponen una nota de media de 6,9. En el caso del grado de vinculación que tienen con su centro, la valoración se sitúa en un 7,4 de media.

Respecto a las ventajas que le ven las enfermeras encuestadas a la sanidad privada, el 46% menciona tener mayor conciliación personal (turnos, horarios, vacaciones…) el 26% destaca la autonomía que tiene en el trabajo, y el 19% menciona el reconocimiento que tiene como profesional.

Para concluir, el informe indica que aquellas enfermeras que trabajan exclusivamente en la sanidad privada presentan mejores indicadores que los que compaginan con el trabajo en la sanidad pública. Además, apuntan hacia la importancia de conocer mejor de manera individual a cada enfermera y entender su momento vital para reforzar su trabajo y bienestar.