ALICIA ALMENDROS.- Leucemia, linfoma, mieloma múltiple… Alrededor de 483.000 personas padecen cáncer hematológico en Europa. Unas patologías que se ven con ojos de esperanza tras las últimas novedades en Hematología. Y es que el abordaje del cáncer de la sangre está pasando del tratamiento tradicional con agentes quimioterápicos a las terapias dirigidas. Un ejemplo es la novedosa terapia CAR (Chimeric Antigen Receptor) que modifica genéticamente las células defensivas del propio paciente para que ataquen y destruyan las células tumorales. “Esto ha supuesto un paso gigante de la mano de los hematólogos gracias a la terapia CAR, que modifica genéticamente las células inmunes del propio paciente (linfocitos T en el caso de la terapia CAR-T) para que expresen receptores que se unan a las células tumorales, proliferen y las destruyan”, ha resaltado José Tomás Navarro, secretario general de la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH) y hematólogo del Instituto Catalán de Oncología (ICO)-Hospital Germans Trias i Pujol, de Badalona (Barcelona), en la III Jornada de Periodistas: Avanzando en el cuidado del paciente hematológico, “cronicidad en Hematología”.
Los medicamentos CAR, aprobados por la Agencia Europea del Medicamento este verano, hasta este momento se dirigen a tratar leucemias linfoblásticas agudas (pediátricas) y linfomas (en adultos). La estrategia terapéutica consiste en extraer y tratar en el laboratorio los linfocitos del paciente que, una vez modificados genéticamente, se administran como medicamento para combatir a las células tumorales. “Los resultados con células CAR-T son espectaculares, sobre todo en niños y jóvenes con leucemia linfoblástica de línea B resistente a tratamientos previos. Tienen una supervivencia al año de más del 65%, cuando hasta ahora apenas llegaba a unos meses”, ha explicado Jorge Sierra, presidente de la SEEH y jefe del servicio de Hematología y Hemoterapia del Hospital de la Santa Creu y Sant Pau de Barcelona.
El cáncer hematológico supone entre el 8 y el 10% de todos los tumores malignos. Y España está siendo un referente europeo en el desarrollo de CARs académicos para su posterior introducción en el SNS. “España está al mismo nivel de los países más avanzados de Europa en este campo, pese a contar con unos recursos mucho más limitados”, han comentado desde la SEHH. De hecho, el presidente de la sociedad ha querido destacar el proyecto que se está llevando a cabo en el Hospital Clínic de Barcelona. “El proyecto ARI es una actividad pionera en Europa que empieza en 2017 gracias a una donación por parte de la familia de una paciente que falleció después de un trasplante de médula. En el hospital se ha administrado un CART académico a 26 pacientes con excelentes resultados”, ha resaltado. “Además, -ha añadido- todo apunta a que pronto se abrirá este mismo proyecto a otros hospitales españoles gracias a una financiación específica del ministerio a través del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII)”.
Estas terapias biológicas es en lo que más se está investigando actualmente, y en ellas la enfermería tiene algo que aportar. «En estas terapias las enfermeras tenemos una labor importante como ocurre en el trasplante. Es cierto que el médico tiene que estar ahí, pero necesita que trabajemos en equipo y las enfermeras tenemos mucho que aportar al paciente en todo el proceso», ha expuesto Patricia Blázquez, enfermera de Hemato-Oncología del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca. Esta enfermera trabaja en los ensayos clínicos de su hospital y asegura que desde Salamanca se quiere llevar a cabo un grupo de investigación que se va a dedicar a las terapias CAR.
Desde la SEHH piden que esta terapia sea accesible para los pacientes que podrían beneficiarse de ella y que el tratamiento se lleve a cabo con la máxima seguridad clínica. “El tratamiento no está exento de complicaciones, por lo que es clave que se administre en centros de referencia con experiencia en estas terapias”, argumenta Sierra. “Y sobre todo, esperamos que el precio de estos tratamientos sea más barato de lo que cuestan en EE.UU (475.000 dólares), porque si no, serían inaccesibles”, ha añadido.
Aprobado en el Interterritorial
Ayer, el Consejo Interterritorial aprobó el Plan de Abordaje de Terapias Avanzadas que define un modelo organizativo y asistencial para el acceso a los medicamentos CAR-T de los pacientes del Sistema Nacional de Salud para los que esté indicado de una forma planificada, equitativa, segura y eficiente.
El modelo organizativo que define el plan se basa en dos estructuras. Por una parte, la red de centros para el uso y administración de estos medicamentos, que se apoyará en la Red de Centros de Referencia (CSUR). Por otro, los centros de fabricación propia de medicamentos CAR-T, que deberán ser identificados y propuestos por cada CC.AA. en el seno de la Comisión Permanente de Farmacia. “El ministerio tiene el proyecto muy bien desarrollado y estamos muy satisfechos porque ha contado con nuestra sociedad. Eso quiere decir que suscribimos el documento. En cuanto al dinero o la financiación, las CC.AA. no tienen dinero para costearlo por lo que el Gobierno central tendrá que dar una partida para que se cubra este tipo de tratamientos y por ello, el ministerio está haciendo mucho énfasis en empezar estas terapias de manera rigurosa”, asegura Jorge Sierra, presidente de la SEHH.