A. ALMENDROS.- Una nueva investigación ha demostrado cómo las batas quirúrgicas usadas en los hospitales retienen la superbacteria Clostridium difficile (C difficile), incluso después de haber sido lavadas y desinfectadas.
En la investigación, llevada a cabo por la Universidad de Plymouth (Reino Unido) y publicada en la revista Applied and Environmental Microbiology, se han analizado varias batas sanitarias de un solo uso -hechas con polipropilnero- que se habían infectado con tres cepas de la bacteria, que puede causar diarrea severa, complicaciones intestinales e incluso la muerte. Tras ser lavadas durante diez minutos con un desinfectante que contenía 1.000 partes por millón de cloro -cantidad y tiempo recomendados por el Departamento de Salud del país- los investigadores encontraron que esta superbacteria sobrevivían, lo que les permitía potencialmente transferirlas a otros artículos hospitalarios. «C difficile es una superbacteria que los hospitales deben impedir que se propague. Este estudio muestra que incluso cuando creemos que el material se ha limpiado lo suficiente, no ha sido así ya que como observamos 1.000 partes por millón de cloro no es suficiente. En el estudio, las bacterias sobrevivieron y crecieron después de la desinfección», ha resaltado Tina Joshi, una de las investigadoras. «Tenemos que llevar unas prácticas de higiene adecuadas, no debemos usar batas fuera de áreas aisladas ya que el trabajo muestra que las bacterias pueden adherirse a cualquier superficie causando infecciones en los pacientes. En un momento en el que las infecciones se están volviendo resistentes a los antibióticos, nos preocupa que otras bacterias lo estén haciendo a los desinfectantes. Por tanto, lo mejor es asegurarnos de seguir unos procedimientos seguros», ha añadido.