REDACCIÓN.- Las enfermedades coronarias son la principal causa de muerte en España y de ellas, la muerte súbita por cardiopatía isquémica es la más frecuente. Contar con un desfibrilador a mano es clave para la supervivencia de las personas que pueden sufrir esta enfermedad. Por esta razón, el Colegio de Enfermería de Navarra firmó en noviembre un convenio de colaboración con el consistorio pamplonés para instalar en la vía pública una torre de cardioprotección y un kit de control de hemorragias. El kit que mantiene cardioprotegida a la ciudad ya se encuentra a disposición de los ciudadanos en la acera de la avenida Pio XII, frente al número 4 de la calle Pintor Maeztu, donde se ubica la sede del Colegio de Enfermería de Navarra. Se presentó en un acto en el que han tomado parte el alcalde de Pamplona, Enrique Maya; la presidenta del Colegio de Enfermería de Navarra, Arantxa Osinaga; el concejal delegado de Seguridad Ciudadana, Javier Labairu; junto al director del Área de Seguridad Ciudadana, Patxi Fernández; el subdirector de Urgencias de Navarra y dirección técnica de la atención a la Urgencia Vital, Kiko Betelu; miembros de la Junta de Gobierno del Colegio, otras autoridades sanitarias y vecinos.
Para todo el mundo
La torre está disponible para la ciudadanía todos los días del año durante las 24 horas. Consta de un desfibrilador semiautomático (DESA), que puede ser utilizado por cualquier ciudadano que sea testigo de una parada cardiaca, y de un teléfono geolocalizado para llamar al 112 con el fin de alertar a los servicios de urgencia al tiempo que se inicia la reanimación cardiopulmonar o, si fuera necesario, solicitar ayuda acerca de su utilización. Durante la presentación se ha desarrollado una demostración sobre su uso. Se trata de la primera torre de este tipo instalada en Pamplona y también aporta como novedad la incorporación de un kit de hemoprotección, dotado con material para el control de hemorragias, que incluye un torniquete de última generación para casos de extrema urgencia y un sistema de vendaje compresivo.
Al mismo tiempo, por primera vez en la capital navarra, se va a señalizar la ubicación de la torre de cardioprotección en un radio de distancia desde el que se pueda llegar caminando hasta el DESA en un tiempo máximo de un minuto.
Formación
De acuerdo al convenio de colaboración firmado entre ambas instituciones, el ayuntamiento de Pamplona ha facilitado el suelo público para la colocación de la torre, al igual que la acometida y el suministro eléctricos. También se encargará de instalar la señalización. Por su parte, el Colegio de Enfermería de Navarra corre con los gastos de instalación de la torre y se ocupará del mantenimiento del dispositivo.
Con esta presentación se ha iniciado el programa de actividades que va a organizar el Colegio de Enfermería de Navarra durante 2020, declarado por la Organización Mundial de la Salud como el Año Internacional de las Enfermeras y la Matronas. Como complemento a la instalación de la torre de cardioprotección, el Colegio va a impartir en los próximos meses formación sobre su uso a distintos colectivos de la zona, como hosteleros, farmacias, comerciantes, colegios y vecinos.
Pamplona, ciudad cardioprotegida
De esta manera continúa el camino emprendido por el Consistorio pamplonés para convertirse en una ciudad cardioprotegida. En junio del año pasado puso en marcha la colocación de 14 aparatos para la prevención de la muerte súbita cardiaca y se comprometió a formar a personal para su uso. Se trata de una iniciativa que forma parte del proyecto ‘Deporte Pamplonés Cardioprotegido – Kirolean Bihotza Babestuta’, con el que se persigue que todas las instalaciones deportivas municipales con control de acceso cuenten con un desfibrilador semiautomático externo, aunque su disposición no sea obligatoria por ley en todas ellas. En concreto, los desfibriladores se destinan a los polideportivos municipales de Arrosadía, Azpilagaña, Ermitagaña, Ezkaba, José Mª Iribarren, Mendillorri (incluyendo Trinquete), San Jorge y Rochapea (incluyendo su campo de fútbol anexo); en los campos de fútbol municipales de Lezkairu y San Jorge; en el Frontón Labrit; en el centro municipal de piragüismo Molino de Caparroso; y en los complejos deportivos municipales de Aranzadi y San Jorge (Aquavox).
Ya disponía de desfibrilador el centro deportivo municipal de San Agustín (Aquavox), lo mismo que otros espacios municipales en los que se ha ido instalando este equipamiento como la Casa Consistorial o los Civivox de Ensanche, Milagrosa y San Jorge. Asimismo, el sindicato APM de la Policía Municipal de Pamplona hizo entrega a los responsables del área de Seguridad Ciudadana de un desfibrilador automático que es utilizado por los propios agentes del cuerpo.
Por último, este miércoles CaixaBank terminó e entregar al Ayuntamiento los cuatro desfibriladores que se había comprometido a donar a la ciudad a través de su Obra Social. El primero fue colocado en la Oficina de Turismo municipal y el resto se ubicarán en los andenes de la antigua estación de autobuses, en la Ciudadela y en el ascensor de Descalzos.