EUROPA PRESS.- Las llamadas telefónicas de una enfermera pueden mejorar la supervivencia de los pacientes tratados por insuficiencia cardiaca. Tal y como ha puesto de manifiesto el último estudio realizado por investigadores del instituto Smidt Heart Institute en Cedars-Sinai (Estados Unidos).

Un tercio de las personas con insuficiencia cardiaca mueren dentro del año posterior a la hospitalización, por ese motivo, los investigadores han estado estudiando formas de mejorar las tasas de supervivencia, ya que, estudios previos han demostrado que entre el 15 y el 20% de las personas hospitalizadas por insuficiencia cardiaca regresan al hospital dentro de los 30 días posteriores.

Método

El reciente estudio ha sido publicado en el Journal of Cardiac Failure e incluyó a 1.313 pacientes mayores de 50 años que fueron hospitalizados por insuficiencia cardiaca aguda descompensada en seis centros médicos académicos de California. La mitad de los pacientes se aleatorizó para recibir un nuevo plan de atención posterior a la hospitalización, donde los pacientes recibieron educación sobre la insuficiencia cardiaca antes del alta, junto con un promedio de cinco llamadas durante un periodo de 180 días. A cada paciente de este grupo también se le proporcionó un tensiómetro y una báscula. De esta forma, las enfermeras programaron llamadas telefónicas periódicas para preguntar sobre el peso, la presión arterial, la frecuencia cardiaca y cualquier síntoma inusual. Así, los pacientes que reportaron resultados o síntomas anormales recibieron más llamadas de seguimiento. 

Para la otra mitad de los pacientes se asignó al azar a la atención habitual, que consistió en recibir educación para la salud por parte de una enfermera antes de ser dados de alta y, para la mayoría de los pacientes, una llamada del hospital una vez en casa. Los investigadores agruparon a los pacientes según el número de sus comorbilidades o cuántas otras enfermedades y condiciones de salud tenían además de la insuficiencia cardiaca. El grupo de comorbilidad baja estaba formado por personas con cero a dos comorbilidades, el grupo moderado incluía a personas con entre tres y ocho comorbilidades y el grupo de comorbilidad alta estaba formado por personas con nueve o más comorbilidades.

Resultados

Los pacientes del grupo de alta comorbilidad que estaban en el grupo de intervención tenían un 25% menos de probabilidades de morir a los 30 días y 180 días que los pacientes del grupo de control. También permanecieron fuera del hospital una media de 152 días frente a una media de 133 días para los pacientes que no recibieron la intervención. Los pacientes en los grupos de comorbilidad baja y moderada que recibieron llamadas más frecuentes no tuvieron resultados diferentes estadísticamente significativos que los pacientes que solo recibieron una llamada telefónica.

Las tasas de reingreso fueron similares para los grupos de intervención y control. «Lo que hace que este estudio sea único es nuestra metodología, cómo agrupamos a las personas según la cantidad de comorbilidades que tenían. Los investigadores pueden considerar usar un enfoque similar para identificar qué pacientes pueden beneficiarse más de las intervenciones para la insuficiencia cardiaca», afirman los científicos.