REDACCIÓN/EUROPA PRESS.- Justo cuando se cumple el plazo de 20 días para descartar más contagios por García Viejo, el jefe de Virología del Instituto de Salud Calos III y miembro del Comité de especial contra el ébola, José María Echevarría, considera que ya puede decirse “con bastante probabilidad” que la auxiliar de enfermería Teresa Romero, único caso confirmado de ébola en España, “desde el punto de vista virológico está yendo hacia la curación”.

En declaraciones a la Cope recogidas por Europa Press, Echevarría ha explicado que la disminución de la carga viral quiere decir “que la paciente controla la infección”. “Probablemente con la disminución que hemos observado ya se puede decir con bastante probabilidad que está eliminando la infección, desde el punto de vista virológico, Teresa está yendo hacia la curación, hacia la eliminación del virus”.

Además, este experto ha destacado que, a diferencia del VIH y la hepatitis, el virus del ébola no genera otras infecciones crónicas, y quien supera la enfermedad la elimina y no la transmite. Además, los enfermos que superan la enfermedad producen anticuerpos capaces de bloquear ese virus, de manera que el plasma de su sangre puede servir para ayudar a otros pacientes a controlar la enfermedad.

Dos pruebas negativas

Mientras, dos de las cuatro personas que ingresaron el jueves en el Hospital Carlos III de Madrid como casos sospechosos de ébola han dado negativo en el primer test de la enfermedad, según ha informado el comité especial creado por el Gobierno para gestionar la crisis.

Uno de ellos es el ciudadano nigeriano que llegó el jueves a Madrid en un vuelo procedente de París, con temblores y síntomas de fiebre, lo que obligó al aeropuerto de Barajas a activar el protocolo por ébola. El segundo es un enfermo que había viajado en la misma ambulancia de la auxiliar de enfermería Teresa Romero, única infectada por el virus hasta ahora. Se consideraba caso de “bajo riesgo” pero ingresó el jueves por un cuadro febril.

No obstante, el protocolo establece que para que los casos sospechosos reciban el alta son necesarias dos pruebas negativas separadas por al menos 48 horas.

Casos pendientes

Por otro lado, hay otras dos personas, ingresadas también desde este jueves, que están a la espera de los resultados de los test. Una de ellas es un misionero de la orden de San Juan de Dios -la misma a la que pertenecían los fallecidos Miguel Pajares y Manuel García Viejo- que regresó de Monrovia (Liberia) el pasado 11 de octubre y del sanitario. La otra es un sanitario ingresado en Tenerife, a donde regresó el día 12 después de haber estado trabajando como voluntario en una zona de alto riesgo en Sierra Leona. El hombre fue ingresado con cuadro febril y dolor de garganta, y también lo están los dos familiares directos que viven con él, aunque no presentan síntomas.