RAQUEL GONZÁLEZ ARIAS.- A pesar de haber copado casi la totalidad de la información, los medios de comunicación, según el periodista Alipio Gutiérrez, no recogieron la realidad de la pandemia en sus primeros meses. Hablamos de marzo y abril, cuando el coronavirus irrumpió en nuestras vidas sin dar tregua y nuestro sistema sanitario colapsó.
Lo que se vivía de puertas adentro en hospitales y otros centros sanitarios o sociosanitarios, como las residencias de mayores, no se reflejaba con fidelidad en los medios tradicionales y sólo las redes sociales se atrevieron a filtrar, sin autorización la mayoría de las veces, lo que de verdad pasaba. Censura en unos casos y autocensura en otros, lo cierto es que, para este periodista, director de contenidos de salud de Telemadrid, lo que vimos fue “una versión edulcorada” de lo que estaba pasando.
El periodista Alipio Gutiérrez
Con el objetivo de contar con la mayor fidelidad posible esa realidad y de reflexionar también sobre cómo la recogieron los medios de comunicación, Alipio Gutiérrez acaba de publicar el libro “COVID-19. Nuestra guerra”. En él, a través de 36 de relatos, varios de ellos de enfermeras, se intenta ‘dibujar’ el caos y la desesperación vividos durante esos primeros meses. “Lo que aparecía en los medios no era lo que ellos nos contaban -enfermeras, médicos, auxiliares, farmacéuticos de hospital…-. Ellos estaban viviendo una guerra y lo sentían como tal. Creo que los medios de comunicación hemos edulcorado demasiado la realidad para que no doliera, para que no hiciera tanto daño”. Y en esa ‘guerra’, nos dice, “los campos de batalla eran las salas de urgencias de los hospitales, las UCIs, las residencias de mayores”. En su opinión, de haberse contado fielmente, quizás los ciudadanos hubieran sido más conscientes y, por ende, responsables, ante la pandemia.
Evitar la imagen de caos
Como periodista, Alipio fue testigo de excepción de muchas historias, historias que le narraban sus protagonistas en la antesala del plató de televisión y que, luego, ellos tampoco se atrevían a contar de la misma forma en directo: “Me contaban una realidad que no era la que contaban en público. Trataban de sobreponerse a la situación que estaban viviendo para no trasladar una imagen de caos absoluto”.
Ilustraciones
Alipio Gutiérrez ha querido mostrar la pandemia, o la guerra, como él la llama, no sólo a través de los relatos sino también de una serie de dibujos que él mismo ha realizado en la que es una de sus facetas menos conocidas. En total, doce dibujos que ilustran tanto la portada como el interior del libro.
El periodista, que siente un cariño especial por la profesión enfermera, ha pasado también por el plató de televisión de Canal Enfermero en Youtube donde, dentro de poco, podrá verse una entrevista en profundidad en la que compartirá y reflexionará sobre algunos de los momentos vividos durante la pandemia y que han dado lugar a este libro. Un libro, por cierto, del que ha dejado un ejemplar firmado y dedicado para nuestras enfermeras y que dentro de poco se sorteará entre los seguidores de Diario y Canal Enfermero.
Estaba claro que no se informó de la realidad pandémica. Pues es un error porque no contribuyó ni contribuye a mejorar la salud,como se está demostrando. Los gobiernos sólo quieren dar buenas noticias, por eso se prohibió dar imágenes de todo aquello que pudiera perjudicartles como gobierno, como por ejemplo los ataúdes amontonados en elpalacio de hielo y otrs más. Error, error. Sí una pandemia de edulcora es menos pandemia. Y si además el Presidente dice que «hemos derrotado al virus», apaga la vela y vámonos. ¿Por qué, entonces hacen campañas de tráfico tan duras y no reflejan la verdad sobre la realidad de la pandemia. Para aevitar el desgaste del Gobierno?. Las imágenes sirven para aprender sobre las consecuencias. Pero si no nos muestran las imágenes, no existen las consecuencias. Así nos va