RAQUEL GONZÁLEZ ARIAS.- En la antesala del Día Mundial de la Diabetes, que se celebra el 14 de noviembre, la Federación Española de Diabetes (FEDE) ha presentado un manifiesto en el que se recogen cuáles son actualmente sus reivindicaciones y todas ellas tienen un denominador común: el acceso. Acceso que se refiere a los sistemas de monitorización de glucosa, a programas formativos, a las últimas novedades terapéuticas, a atención especializada y medicamentos orales, independiente del lugar de residencia o del tipo de diabetes que se tenga y es que, como se ha puesto de relieve durante el encuentro, actualmente, existen inequidades entre las diferentes comunidades autónomas y los pacientes tipo 2 son los grandes olvidados, una situación que se ha agravado durante la pandemia.

Como ha subrayado Juan Francisco Perán, presidente de FEDE, “no puede ser que en función de la comunidad autónoma donde se viva los pacientes reciban un manejo u otro. Además, los pacientes diabéticos tipo 2, que representan el grueso de pacientes, han sido los grandes olvidados. Es preciso que cuenten con sistemas de monitorización de glucosa, algo que ya se ha aprobado en el senado pero que ahora dependerá de cada comunidad autónoma que se adopte o no. Estos sistema permitieron el seguimiento y control de los pacientes diabéticos tipo 1 durante la pandemia, algo que no sucedió con los tipo 2. Además, es preciso que cuenten con programas de formación, orientados fundamentalmente a la educación en nutrición. Y, sin duda, hay que reforzar la Atención Primaria porque en estos momentos no hay profesionales suficientes para atenderles. Tampoco debemos perder de vista que la diabetes es una enfermedad que lleva muchas otras asociadas, requiere de un manejo multidisciplinar y por ello es clave que los pacientes accedan a la atención especializada: nutricionistas, psicólogos… De otro lado, reclamamos el acceso a determinados tratamientos que hoy están sujetos a obstáculos como la necesidad de un visado, un requisito que deja fuera a muchos pacientes”.

Enfermera experta

En España se estima que hay 6 millones de pacientes que conviven con esta patología y las previsiones, desgraciadamente, no son a la baja. Detrás, un estilo de vida marcado por las dietas inapropiadas y el sedentarismo. Para mejorar el control de los pacientes, evitar la progresión y con ello las complicaciones asociadas, y detener esta escalada, los pacientes piden contar con enfermeras expertas en diabetes, una reivindicación en la que FEDE va de la mano con el Consejo General de Enfermería.

Como ha subrayado Diego Ayuso, secretario general del Consejo General de Enfermería, “nuestro papel es muy relevante en la atención y cuidado de los pacientes con diabetes y sus familias, puesto que esta es una enfermedad que tiene un gran impacto no sólo en quien la sufre sino también en su entorno. Es fundamental que los pacientes adquieran unos hábitos saludables y la enfermera es quien debe encargarse de esa educación para la salud. Para ello es necesario que tengamos un conocimiento experto, avanzado y eso es lo que estamos pidiendo, una reivindicación en la que vamos de la mano de FEDE y que representa una de nuestras prioridades puesto que la diabetes es una enfermedad muy prevalente y que de hecho las enfermeras estamos acostumbradas a tratar. Ha habido intentos en determinadas comunidades autónomas en este sentido, pero no es suficiente, necesitamos una formación reglada que sea reconocida mediante el diploma de práctica avanzada. Es una cuestión de sentido común sobre la que seguimos sin obtener respuesta. El real decreto de diplomas de acreditación es del año 2015 y estamos en 2021 y todavía no se ha desarrollado para ninguna profesión sanitaria”. Sobre este último punto, Ayuso ha resaltado que desde el Consejo General de Enfermería han pedido una reunión con la ministra Carolina Darias para exponer cuál es la situación de la profesión y plantear sus reivindicaciones, siendo precisamente este uno de los puntos sobre la mesa.

Diego Ayuso también ha destacado que es preciso contar con más enfermeras para mejorar la educación para la salud de la población general e intentar así frenar el incremento de casos de diabetes tipo 2. Hay que reforzar la Atención Primaria, donde el ratio de enfermeras en España es la mitad de la media europea y dotar a los centros educativos de enfermeras escolares porque la educación para la salud, ha subrayado, empieza desde edades muy tempranas.

Y estas acciones revertirían no sólo en una mejor atención de los pacientes sino también en un ahorro para el Sistema Público ya que un buen control de la diabetes se traduce en un gasto de 883 euros anuales para el sistema frente a los 2.132 de un paciente mal controlado.

En este sentido, Noemí González Pérez de Villar, endocrinóloga en el Hospital Universitario de la Paz y secretaria de la Sociedad Española de Diabetes, ha destacado también el papel de la enfermera en la adherencia terapéutica de estos pacientes: “más de 1 de cada 3 pacientes con diabetes no se toma la medicación y ahí las enfermeras son también clave para que entiendan por qué se tienen que tomar la medicación y cómo para conseguir un buen control”.

Compromiso institucional

La celebración de este encuentro, que tuvo lugar en el salón de actos del Congreso de los Diputados, contó con la intervención de la ministra de Sanidad, que lo hizo mediante un mensaje grabado, y la asistencia de Rosa Romero, presidenta de la Comisión de Sanidad en el Congreso.

En su mensaje, Darias aseguró que desde el gobierno se trabaja ya por esa equidad que piden los pacientes y aseguró que estaban alineados con las reivindicaciones planteadas desde FEDE. Además de aprobar el acceso a los sistemas de monitorización continua para los pacientes diabéticos tipo 2, algo que hay que trasladar al ámbito autonómico, aseguró que se está también trabajando en la mejora de la atención del pie diabético y en el cribado de la retinopatía diabética.

Por su parte, Rosa Romero ha reconocido que “para mejorar la atención sanitaria y la calidad asistencial de los pacientes hay que invertir en Atención Primaria, actualmente colapsada”. En cuanto a la demanda del Consejo General de Enfermería y de SEDE con respecto a la especialización de las enfermeras también ha coincidido en que “sin duda, esa especialización puede redundar en un beneficio positivo y tenemos que tender a ello”.

Esquemas terapéuticos

El encuentro ha contado también con la participación de Pedro Casado, del Servicio de Medicina Interna del Hospital de La Princesa, quien ha explicado que “afortunadamente, hoy contamos con una diversidad de estrategias terapéuticas mucho más amplia que hace algunos años y la complejidad hoy estriba en saber elegir el esquema terapéutico más beneficioso para el paciente. Para el paciente es fundamental contar con facultativos versados en el manejo de esta enfermedad y eso no es fácil. En un entorno como es Atención Primaria, que es donde generalmente se maneja al paciente con diabetes tipo 2, hay una gran presión asistencial y tan poco tiempo por paciente que a menudo se elige la estrategia más fácil y no la más beneficiosa”.