ALICIA ALMENDROS.- Una para cada día del año. Un total de 365 iglesias recubren el territorio maltés. Un destino perfecto para disfrutar de Semana Santa lejos de España, pero sin dejar a un lado la tradición de estos días. Y es que Malta es el sitio ideal porque sus habitantes están considerados como uno de los pueblos cristianos más antiguos del mundo. Tradiciones, fe y gastronomía se dan la mano para ofrecer al visitante multitud de experiencias en un entorno único como son las islas maltesas.

De entre sus edificios religiosos destaca la Concatedral de San Juan, donde habita La decapitación de San Juan, la obra más importante del renombrado pintor italiano Caravaggio; y la Colegiata de la Iglesia Parroquial del Naufragio de San Pablo, donde se conserva una imagen del santo tallada en madera que se saca en procesión, así como parte de la columna donde fue decapitado en Roma y un hueso de su muñeca.

Fiestas

El Domingo de Ramos marca el comienzo oficial de la Se-mana Santa, pero es el Jueves Santo el día más especial en Malta. Los fieles recorren la isla siguiendo lo que se cono-ce como “las Siete Visitas”: un acto familiar tradicional, en el que visitan siete iglesias diferentes. La visita más popular en Semana Santa es la del Oratorio de Saint Dominic, donde se puede contemplar el cuadro de la última cena de Jesús. Durante este día también se celebra el Lavado de los Pies, escenificado por devotos que interpretan a los apóstoles lavando los pies de Jesús.

Concatedral de san juan

Concatedral de san juan

El Viernes Santo los malteses salen a las calles enfunda-dos en ropajes de la época, para unirse a las procesiones de estatuas de tamaño real que desfilan al compás de la música fúnebre, interpretada por las bandas de la isla. Sin duda, unos días de fiesta diferentes a lo que estamos acostumbrados a ver en nuestro país.

Aunque en Malta también es tradición comer huevos de Pascua estos días, el dulce más tí-pico es el figolla, un tipo de bollo de almendras y azúcar que sin duda hay que probar antes de finalizar el viaje. Los que viajen sin niños y quieran disfrutar de una escapada romántica, puede recorrer las estrechas y angostas calles de La Valeta que invitan a pasearlas de la mano mientras se descubren maravillosos palacios y edificios de estilo barroco. Desde el Gran Puerto, las parejas pueden embarcarse en una dghajsa, una embarcación tradicional maltesa similar a las góndolas venecianas, que les guiará hasta las Tres Cuidades (Vittoriosa, Senglea y Conspicua) en una romántica travesía surcando el azul.

Deporte

Malta - Valletta Upper Barrakka by Clive VellaPara los que prefieran disfrutar de estos días lejos de las tradicionales procesiones, Malta ofrece la posibilidad de escalar impresionantes acantilados, disfrutar del paisaje en bicicleta o recorrer todos los rincones de este destino en un jeep safari. Y pensando en que quizás haga buen tiempo, el viajero se puede dar el primer chapuzón del año. Malta ofrece un sinfín de posibilidades en las que descubrir el Mediterráneo desde sus profundidades mientras se observa el paisaje submarino y valiosos restos históricos como el “Um El Faroud”, un carguero que explotó en la década de los 90 y que está rodeado de coloridas esponjas y corales.

El paraíso Playmobil

Semana Santa y familia van de la mano, y Malta ofrece multitud de opciones para disfrutar con los más pequeños de la casa. Podrán conocer cómo se fabrican los Playmobil o adentrarse en el divertido Parque de Atracciones Playmobil, refrescarse en el Splash & Fun Park, un paraíso infantil lleno de toboganes, zonas de juego y con la piscina de olas más grande de Europa.