DAVID RUIPÉREZ / ÁNGEL M. GREGORIS.- María Escobar y Lola Vera son las dos enfermeras que han recorrido España con la Ruta Enfermera. María ha estado desde que comenzó en junio de 2023 y Lola se incorporó en octubre. La primera nació en Palencia, estudió en Madrid y tiene experiencia en UVI pediátrica y de adultos. Lola, por su parte, nació en Huelva y estudió la carrera entre Mérida y Huelva; es experta en el mundo de la Oftalmología y, actualmente, vive en Alicante. Han conocido de cerca todos los entramados de la ruta y han sido la cara más visible del gran tráiler enfermero en todas y cada una de las paradas.
¿Cómo se toma la decisión de embarcarse en la ruta?
María: “Recuerdo perfectamente de cómo lo vi. Estaba en Soria (lugar donde reside), haciendo la haciendo la compra y me llegó información del colegio. Es cierto que suele ser esa información que dejas para leerla al final del día, pero cuando lo vi, solté las bolsas de la compra y en ese instante tuve que abrir bien el mensaje porque fue como una llamada. Dije: ‘Esto es para mí’. Me pareció una iniciativa muy bonita, muy necesaria y, sobre todo, muy emocionante. Creo que cuando nos llega en cualquier ámbito de la vida algo emocionante no deberíamos mirar para otro lado”.
Lola: “Yo me incorporé un poco más tarde. En aquel momento vivía en Tarragona y después de un pequeño paro laboral, viendo qué hacer… Quería seguir con la enfermería, pero hacer algo diferente. Fue ahí cuando me llegó la oportunidad de embarcarme en la Ruta Enfermera y muy agradecida”.
¿Qué os ha aportado a nivel personal esta relación tan directa con las personas?
Lola: “A nivel personal, no os podéis imaginar todo lo que nos ha aportado. Pero, sobre todo, resaltar y dar la importancia a la comunicación. Una buena comunicación es fundamental en todo, para hacer un trabajo en equipo, todo el engranaje que lleva detrás el tráiler, de parte del Consejo, de cada colegio, los enfermeros que venían a colaborar… Hemos vivido momentos muy mágicos y bonitos”.
María: “Para mí ha sido un reto total tanto a nivel personal como profesional. Vivir fuera de casa conlleva muchas cosas, muy bonitas y también muchas complicaciones. Haberlas sabido gestionar con ese equipo que se ha gestado aquí dentro y que no nos conocíamos ha sido brutal. También creo que se ha dado un ingrediente vital, que es el factor tiempo, porque la oportunidad que me ha dado la Ruta Enfermera como profesional de tener tiempo de calidad y de escucha a cada persona que ha venido contándonos alguna necesidad… Creo que hemos tenido la oportunidad de generar pequeñas consultas a modo privado y llegar a esa persona. Nos hemos ido satisfechas a ‘nuestras casas’ tras acabar con cada jornada”.
¿La gente tiene una visión parcial de lo que hacen las enfermeras en la realidad?
Lola: “Hay personas que suben y que a día de hoy nos ve poniendo vacunas y poco más, pero también hay gente muy agradecida porque han estado en contacto con la enfermería muy a pie de cama y antes de entrar ya están dando las gracias y nos preguntan si de verdad es necesaria esta campaña porque ellos piensan que ya se nos valora como se nos merece”.
¿Cuáles son vuestros planes post-ruta? ¿queréis probar otras facetas de la profesión? ¿cómo os veis en los próximos cinco años?
María: “La oportunidad de ver todos los escenarios en los que podemos contemplar la enfermería, en al extrahospitalaria, ha venido mucha enfermera escolar… En mi caso, me gustaría dedicarme a la extrahospitalaria porque me gusta la calle”
Lola: “Tengo que meditarlo. Es verdad que la ruta me ha dado mucha apertura. Tengo que parar, asimilar todo y componer”.