RAQUEL GONZÁLEZ ARIAS.- Un año más, el Hospital Universitario Clínico San Carlos de Madrid ha querido sumarse a las celebraciones en torno al 12 de mayo, Día Internacional de las Enfermeras. En esta ocasión, lo ha hecho con una jornada dirigida a difundir y potenciar el liderazgo de la profesión. Un encuentro en el que se han presentado distintas comunicaciones, todas ellas correspondientes a trabajos liderados por enfermeras y que han sido distinguidos recientemente en congresos científicos.
Entre los temas sobre la mesa, la lactancia materna, de Estefanía Muñoz Alba, matrona del mismo hospital, ha sido reconocido como el mejor trabajo presentado.
Dolor y baja eficacia
En su intervención, se ha referido a las dificultades asociadas a la lactancia y a los motivos que con más frecuencia llevan a la mujer a abandonar. Según el estudio en el que ha participado, las dificultades son múltiples siendo “el dolor y la baja autoeficacia” las más destacables.
Respecto al dolor, los principales desencadenantes que destaca esta experta son: las grietas, las perlas de leche, la mastitis y los problemas de agarre. En cuanto a la “baja autoeficacia” explica que esta se refiere “a aquellas madres que quieren ofrecer a los recién nacidos y lactantes leche materna, pero creen que no lo hacen bien o se sienten inseguras”.
Actitud
En torno a estas dificultades, puede haber otro tipo de factores que contribuyan también al abandono y entre ellos se encuentran la propia actitud de la mujer y los recursos que se pongan a su disposición. “Cuando tenemos una actitud positiva y contamos con los recursos que necesitamos, nuestra ventana de tolerancia al estrés se amplía; y al contrario, cuando nuestra actitud es de rechazo, nuestra ventana de tolerancia se estrecha, favoreciendo así el abandono. En definitiva, que algo se convierta en una dificultad depende de los recursos (físicos, psicológicos y sociales) que tiene la persona para hacer frente a esa dificultad”.
Control de la situación
Para esta enfermera, cuando se habla de lactancia materna es fundamental que la mujer sienta que controla la situación. Si esto no es así y surgen dudas, entonces, debe pedir ayuda. “La ayuda se puede encontrar en grupos de apoyo, profesionales formados y recursos que ofrezca la propia comunidad”, explica. Además, añade, “las personas del entorno pueden ayudar también apoyando a la mujer en sus quehaceres diarios para que disponga de más tiempo para ella y pueda desconectar momentáneamente. Esto contribuye a su recuperación física y mental, las dificultades se hacen más tolerables y es más probable avanzar en la dirección deseada”.
También es importante que la mujer se quiera a sí misma y se cuide, sin culpabilizarse ante los contratiempos que puedan surgir. “Esto se consigue dirigiéndose a sí misma palabras amables, con un pensamiento más positivo sobre la posibilidad de encontrar soluciones válidas y tratándose como trataría a alguien querido y cercano. De esta forma, se gana una mayor tranquilidad y se favorece el vínculo con el bebé”.
Matronas, fundamentales
En todo esto, apunta, las matronas pueden ayudar desde múltiples vertientes, por ejemplo, mediante la atención y los cuidados específicos. “Esto significa instruir en conocimientos y habilidades, pero también ofrecer una solución individualizada a los problemas de lactancia basada en la evidencia. Asimismo, es necesario que ayudemos, en la medida de lo posible, a generar confort físico porque esto induce a un estado de calma”. Para ello, se pueden dar pautas de una correcta alimentación, hidratación, posturas antiálgicas y del manejo del dolor. Y para contribuir a ese clima positivo, añade, “podemos recurrir también a otro tipo de intervenciones basadas en la empatía, validando las emociones y la experiencia de la mujer”.
Promoción de la lactancia
La promoción de la lactancia, subraya Estefanía Muñoz, contribuye tanto a la salud infantil como a la materna ya que “protege contra enfermedades crónicas e incluso de enfermedades mortales”.
En el Hospital Universitario Clínico San Carlos, apunta, se fomenta esta práctica mediante el seguimiento de la estrategia IHAN (Iniciativa para la Humanización de la Atención al Nacimiento y la Lactancia). Además, hay una clara apuesta por la formación continua de profesionales y su asistencia e implicación en eventos científicos relacionados. Cuentan con impulsores de la lactancia, con un comité y una unidad de este tipo así como con una matrona que organiza talleres periódicamente coincidiendo con la semana de la lactancia. “Incluso las madres participan en la visibilización de la lactancia compartiendo sus experiencias y fotografías”, concluye.
Liderazgo
La exposición de comunicaciones ha tenido lugar tras la celebración de una mesa redonda en la que, explica María Montealegre, del Área de Docencia y Formación Continuada del hospital, “hemos contado con la presencia de enfermeras con gran experiencia y cualidades para motivar equipos y liderar proyectos” y en la que se “ha debatido sobre el liderazgo enfermero en cada uno de los muy diversos roles que se desempeñan desde la enfermería”.
Desde el Hospital Universitario Clínico San Carlos, añade, “se apuesta por la excelencia en cuidados y, en este sentido, este año implantaremos una guía de buenas prácticas clínicas para el desarrollo y mantenimiento del liderazgo en enfermería”.
Asimismo, María Montealegre ha querido destacar el “elevado nivel científico de los trabajos presentados; trabajos, sin duda, que permitirán abrir la puerta a nuevas oportunidades, experiencias, enfoques y vías de mejora del cuidado del paciente”.